BARCELONA. La fiscalía pidió penas de entre cinco años y medio y 30 años de cárcel para diez acusados de integrar una red de proxenetas que atemorizaba a prostitutas nigerianas con ritos de vudú en un juicio que se inició hoy en Barcelona.

 

Los acusados fueron detenidos en 2012 por la Policía regional de Cataluña por explotar sexualmente a jóvenes nigerianas, a las que forzaban a prostituirse para saldar las deudas de entre 30 mil y 50 mil euros que habían contraído para que las sacaran del país africano.

 

Según el fiscal, para mantener cautivas a las chicas la red de “proxenetas del vudú” las amenazaba con daños contra ellas o sus familiares que seguían en el país de origen a través de ritos de vudú -una tradición muy arraigada en Nigeria-, y con frecuentes malos tratos.

 

En el juicio, que está previsto que quede visto para sentencia a mediados del próximo mes de diciembre, los acusados se desvincularon de cualquier organización criminal y negaron que se lucraran con la prostitución.


Además, alegaron que las conversaciones telefónicas intervenidas que les involucraban las realizaron personas a las que dejaron sus teléfonos, por lo que no se hacen responsables de todo lo que se les atribuye.

 

El fiscal consideró por el contrario que los acusados integraban una red asociada con una de las organizaciones criminales más importantes de Nigeria, que entre finales de 2007 y de 2012 se dedicó a la captación e introducción en España de jóvenes nigerianas para su explotación sexual.

 

Las víctimas eran mujeres jóvenes, vulnerables y sin recursos en Nigeria y a las cuales se les ofrecía trasladarse a España para trabajar y formarse profesionalmente, según el fiscal.

 

Asimismo, añadió que en algunos casos algunas de las mujeres que empezaron ejerciendo la prostitución fueron subiendo peldaños en el escalafón de la organización, para encargarse directamente del control, vigilancia y recaudación de las nuevas víctimas.

 

La acusación se sustentó en una laboriosa investigación de la Policía regional catalana, que intervino los teléfonos de varios de los acusados y captó conversaciones comprometedoras, en las que se oía a los detenidos hablando de que algunas chicas no pagaban las deudas contraídas. EFE