El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, aseveró que a 300 días de los hechos de Iguala, las autoridades de los tres niveles de gobierno han fallado en sus responsabilidades, pues ni han atendido a las víctimas ni han investigado conforme a derecho la muerte de seis personas y la desaparición de 43 normalistas.

 

Durante la presentación del informe Estado de la investigación del caso Iguala, el ombudsman señaló las autoridades federales y locales dejaron de realizar las diligencias ministeriales y tampoco ejecutaron las órdenes de aprehensión, lo cual impidió la investigación exhaustiva e integral de los hechos.

 

Por ello, el presidente de la CNDH emitió 32 observaciones y propuestas a autoridades de los tres niveles de gobierno sobre su actuación en los hechos ocurridos entre el 26 y 27 de septiembre del año pasado.

 

“México no es el mismo después de Iguala, pues los hechos ocurridos entre la tarde del 26 y la noche del 27 de septiembre de 2014, en los municipios de Iguala y Cocula, Guerrero, forman por su naturaleza el más grave conjunto de violaciones a los derechos humanos, además de un cúmulo de crímenes de todo orden, de cuantos haya memoria reciente en este país”, dijo González Pérez.

 

La investigación Estado de la investigación del caso Iguala está contendida en un documento de 62 cuartillas, donde la CNDH hace el análisis de la información oficial y la recabada entre los involucrados de aquella noche donde integrantes de la policía municipal de Iguala, en colusión con la delincuencia organizada, asesinaron a seis personas y levantaron a 43 normalistas.

 

Este caso, añadió el ombudsman, es muestra de la barbarie al que se ha llegado, por lo que es imperativo por un lado romper los vínculos de la delincuencia con las autoridades, pero también dar garantías de la no repetición.

 

“No tenemos que esperar para ello a que suceda otro caso de igual o mayor gravedad. El momento de actuar es ahora y con ello se daría sentido y significado al dolor, al sufrimiento y a la indignación que este caso ha generado”.