En México 2.5 millones menores de edad trabaja informó la Organización de las Nacionales Unidas (ONU) en un estudio en el que señala que además, uno de cada cinco lo hace para costear sus estudios.

 

En el marco del día mundial contra el trabajo infantil –que se celebra este viernes 12 de junio– la Unicef y la Unesco instan al Estado mexicano para que promueva “la educación gratuita y de calidad” a fin de prevenir y eliminar el trabajo de los menores de edad.

 

“Las organizaciones de las Naciones Unidas invitan al país (México) a poner atención en la calidad de la educación secundaria y media superior y en la asistencia escolar hasta cumplir la mayoría de edad, de forma tal manera que les aleje del trabajo infantil”, afirmó la ONU.

 

En el documento, del que 24 HORAS tiene copia, el director de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en México, Thomas Wissing, explicó que el trabajo infantil afecta la salud, así como el desarrollo integral de los niños y adolescentes.

 

“Su principal causa es la pobreza de los hogares, sin embargo no resuelve su situación económica, ya que por cada dos años que los niños no estudian, ganan 20% menos en sus trabajos cuando son adultos”, sostiene el funcionario internacional.

 

El documento –entregado a titulares de las cámaras del Congreso de la Unión, Julio César Moreno y Miguel Barbosa, respectivamente– recuerda que de este universo existen 2.1 millones de niños que no asisten a la escuela, cifra que representa 7.2% de la población mexicana entre 5 y 17 años de edad.

 

“La primera razón por la que las niñas y los niños no asisten a la escuela es la falta de interés o aptitud (MTI 2013), lo que está relacionado con la baja pertinencia y calidad de la educación”, signa en su reporte la ONU.

 

En este sentido, dichas organizaciones internacionales resaltaron la necesidad de que el sistema educativo mexicano dé seguimiento personalizado a los niños más vulnerables: lo de las comunidades indígenas, con discapacidad o migrantes, así como los hijos de jornaleros agrícolas.

 

“La tasa de ocupación infantil y la inasistencia escolar en México aumentan con la edad: 1.4% de niñas y niños entre 5 y 9 años realizan actividades económicas; 6.3% de quienes tienen entre 10 y 13 años, y 20.3% de los adolescentes entre los 14 y los 17 años de edad”, indica el documento.

 

Por su parte, Isabel Crowley, representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en México (Unicef, por sus siglas en inglés), recordó que la Convención sobre los Derechos del Niño –ratificada por México hace 25 años– establece “el derecho del niño a estar protegido contra la explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social”.

 

En el mismo informe, Nuria Sanz, quien representa la oficina de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en nuestro país, resaltó que el acceso universal a la educación está garantizada hasta que el alumno alcance la edad mínima que fija la ley para acceder a un empleo, es decir, 18 años para el caso de nuestro país.

 

La ONU recordó al Estado mexicano que la comunidad internacional examinará– durante los próximos meses– las razones de su incapacidad para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio respecto a la educación y establecerá nuevas estrategias.