VIENA. México abogó ayer, en una reunión de Naciones Unidas, por abrir un debate sin prejuicios ni condiciones previas sobre las políticas internacionales de drogas, al entender que la actual estrategia no ha dado los resultados esperados y que se ha centrado demasiado en el control de la oferta.

 

“La actual estrategia no ha dado, por decir lo menos, los resultados esperados a nivel global”, afirmó el subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de México, Juan Manuel Gómez Robledo, ante el pleno de la Comisión de Narcóticos de la ONU en Viena.

 

“Esta evaluación que hicimos está respaldada por datos”, aseguró, para recordar que, según Naciones Unidas, en 2012 los consumidores de drogas ascendían a unos 250 millones de personas, cuando en 2005 eran menos de 200 millones.

 

“Ante esta realidad debemos preguntarnos cómo podemos articular la cooperación internacional para tener mejores resultados”, destacó.

 

Para ello, declaró, es “indispensable asegurar un debate amplio, abierto, sin preconcepciones, sin precondiciones, sin prejuicios, absolutamente incluyente, que tenga en cuenta todas las experiencias y todas las voces”.

 

“No podemos repetir acciones del pasado y esperar resultados diferentes”, destacó Gómez Robledo, para agregar que hay que “construir consensos globales” que permitan “ser más efectivos, y acaso más humanos, frente al fenómeno que enfrentamos”.

 

“Debemos buscar opciones que no criminalicen a las víctimas directas o indirectas”, agregó.