El presidente Enrique Peña Nieto oficializó ayer el nombramiento de tres nuevos generales en los puestos de mayor jerarquía de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), sólo detrás del secretario Salvador Cienfuegos, y en lo que representa el movimiento en la cúpula castrense más relevante del sexenio.

 

Oficialmente no se precisó un motivo de estas modificaciones, aunque se dijo que los generales que ocupaban los puestos pasaron a situación de retiro.

 

Los cambios coinciden con el inicio del tercer año de mandato del Presidente, pero también con un contexto en el que el trabajo del Ejército ha sido cuestionado luego de casos como el de las ejecuciones extrajudiciales de Tlatlaya, el de la invasión de militares armados en la Universidad de Coahuila, entre otros.

 

La SEDENA informó que como subsecretario de la Defensa fue designado el general de División Noé Sandoval Alcázar, en sustitución de Virgilio Méndez Bazán.

 

De acuerdo con la dependencia, el jalisciense Sandoval Alcázar tiene una amplia trayectoria académica que incluye una maestría en Administración Militar, y ha ocupado numerosos cargos incluyendo el de Comandante de la Novena Zona Militar en Culiacán, Sinaloa.

 

Como Oficial Mayor de la Sedena fue designado el general de División Gilberto Hernández Andreu, originario de Distrito Federal, y quien cuenta entre otras cosas con una Maestría en Seguridad de la Información por el Centro de Estudios Superiores Navales de la Marina. Ha ocupado varios puestos entre ellos el de Comandante de la Segunda Región Militar en Baja California.

 

En tanto, el general de División Daniel Velasco Ramírez fue designado Inspector y Contralor del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, área que se encarga de la supervisión e investigación de conductas irregulares de los soldados.

 

De acuerdo con la dependencia castrense, Velasco también cuenta con Maestría en Administración Militar y ha ocupado varios cargos entre los que destacan el de Presidente del Supremo Tribunal Militar.

 

GH