MURSITPINAR, Turquía. Han surgido nuevas acusaciones de que el grupo Estado Islámico ha aumentado su arsenal con bombas de cloro y aviones de combate, armas que podrían ayudar a los extremistas en Irak y Siria.

 

Combatientes kurdos en la fronteriza ciudad siria de Kobani con ayuda de bombardeos de la coalición comandada por Estados Unidos repelen la fuerte ofensiva que por más de un mes que ha arremetido el Estado Islámico (EI).

 

El presidente turco dijo que permitirá que rebeldes sirios transiten a través de su país para ayudar a los asediados defensores de ese poblado, pero tanto los kurdos como los rebeldes negaron que estuviera gestándose tal plan, subrayando diferencias sobre estrategias que están dificultando los esfuerzos por hacer retroceder a los extremistas.

 

En Irak, funcionarios dijeron que milicianos del grupo Estado Islámico utilizaron gas de cloro durante combates con fuerzas de seguridad y rebeldes chiitas el mes pasado en el norte de Bagdad. Si los reportes son confirmados, sería la primera vez que extremistas sunitas tratan de utilizar cloro desde que tomaron extensiones grandes de territorios en el norte sirio e iraquí a inicios de este año.

 

Las declaraciones en Irak ocurrieron dos días después que funcionarios curdos y médicos señalaron que creían que los combatientes del grupo Estado Islámico habían lanzado cierto tipo de gas tóxico en un distrito del este de Kobani. Aysa Abdula, una funcionaria curda de alto rango con residencia en esa ciudad, mencionó que los ataques ocurrieron la tarde del martes y que algunas personas sufrieron síntomas que incluyen mareo y ojos llorosos. Ella y otros funcionarios dijeron que los médicos carecen de equipo para determinar qué tipo de químicos fueron utilizados.

 

El secretario estadounidense de Estado John Kerry dijo que no podía confirmar las acusaciones iraquíes de que se utilizó un gas tóxico contra fuerzas de seguridad y rebeldes chiitas, pero calificó las acusaciones como “extremadamente graves”. Señaló que el cloro puede ser considerado un arma química si es mezclado con otros agentes tóxicos.

 

“La utilización de cualquier arma química es un acto detestable”, dijo Kerry en una conferencia de prensa en Washington. “Es contra la ley internacional. Y estas acusaciones recientes subrayan la importancia del trabajo en el que estamos comprometidos actualmente”.