Los órganos de inteligencia en México y en particular el Centro de Investigación para la Seguridad Nacional (Cisen) se encuentra en alerta tras el anuncio realizado ayer por el grupo guerrillero  (ERPI) de emprender acciones de corte militar en Guerrero tras la desaparición de decenas de normalistas de Ayotzinapa.

 

Ayer se dio a conocer un comunicado escrito y un video en el que el ERPI advierte de la formación de la llamada “Brigada Popular de Ajusticiamiento 26 de Septiembre” para emprender acciones contra Guerreros Unidos, al que calificaron como un “cártel de sicarios del Estado”.

 

El comunicado, fechado el 6 de octubre pasado, fue difundido en el portal de internet CEDEMA.ORG, reconocido por el Cisen (en un oficio de respuesta a la solicitud de información 0410000001014) como una plataforma de comunicación válida para la difusión de información de movimientos armados.

 

Fuentes del gabinete de seguridad consultadas por 24 HORAS indicaron que las primeras revisiones hechas por los aparatos de inteligencia revelan que el comunicado es legítimo, es decir, sí proviene del grupo guerrillero, por lo que la amenaza es real.

 

Es por ello se han activado los protocolos ya establecidos ante la posible actividad de movimientos armados que pudieran afectar la seguridad nacional en una región del país.

 

Bajo coordinación del Cisen, las dependencias del gabinete de seguridad nacional establecieron un centro de control específico para el dar seguimiento a grupos criminales y subversivos en la entidad. Incluso, se ha redoblado el reconocimiento aéreo con UAVSs (aeronaves no tripuladas) del Ejército y la Policía Federal.

 

Contra Guerreros Unidos y Chuchos

 

En su comunicado difundido ayer el ERPI advierte que los hechos ocurridos en Guerrero en agravio de “los compañeros normalistas” los obligan a “romper el silencio” y hacer una declaración de tres puntos.

 

“Se convoca al interior de nuestras filas y al pueblo en general a la conformación de la Brigada Popular de Ajusticiamiento 26 de Septiembre, expresamente fundada para enfrentar en aspectos político-militares esta nueva afrenta del narcoestado mexicano y particularmente, al cártel de sicarios del Estado, mal llamado Guerreros Unidos”, indica como primer punto.

 

Como segunda vía de acción el ERPI instruye a sus elementos para que se recabe toda la información disponible respecto a efectivos, propiedades y demás intereses del grupo Guerreros Unidos y se proporcionen los datos ya sea por vías públicas o secretas.

 

En el tercer punto, declaran a la corriente Nueva Izquierda del PRD, conocida popularmente como Los Chuchos, de ser cómplices en la desaparición y homicidio de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa.

 

Cabe señalar que el comunicado emitido por el ERPI también fue difundido en un video donde se aprecia a un integrante de este grupo, con un uniforme de campaña tipo militar y el rostro encapuchado leyendo el documento.

 

Disminuido pero activo

 

Documentos desclasificados del Cisen identifican al ERPI como un grupo de corte guerrillero escindido del Ejército Popular Revolucionario (EPR) y con influencia en todo Guerrero, aunque se presumía que su capacidad operativa había comenzó a declinar en los últimos años.

 

La primera irrupción del ERPI documentada por el Cisen data del 7 de junio de 1998 en un enfrentamiento con el Ejército Mexicano que dejó como saldo la muerte de 11 milicianos. Estos hechos se registraron en la comunidad de El Charco, municipio de Ayutla de los Libres, Guerrero.

 

De acuerdo con los datos de inteligencia, en la dirección nacional del ERPI figuraban personas como Jacobo Silva Nogales alias Comandante Antonio, detenido a principios de la década pasada, así como El Comandante Ramiro, que presuntamente falleció el año pasado.