Para mejorar el comercio entre México y el Caribe es fundamental firmar con todos los países sendos tratados de protección recíproca de inversiones que ahora no existen, consideró Juan Manuel Valle Pereña, director de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMECID).
Al inaugurar en esta capital el foro “México y el Caribe en la Búsqueda de Nuevas Oportunidades de Comercio e Inversión”, en el marco de la VI Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Asociación de Estados del Caribe, dijo que es fundamental impulsar estos acuerdos.
Sin embargo se puede comenzar el trabajo porque ahora hay muchas oportunidades para desarrollar proyectos en sectores como turismo, infraestructura, energías renovables, patrimonio compartido (natural y cultural) y agricultura.
Valle Pereña recordó que el sector automotriz mexicano es el que más presencia tiene en el Caribe sobre todo con vehículos de transporte ligero, si bien hay números y sectores donde se puede trabajar. Expresó que el comercio entre México y el Caribe equivale a la cifra que se alcanza en tan sólo un día y medio entre México y Estados Unidos.
En el mismo encuentro, el secretario general de la Asociación de Estados del Caribe (AEC), Alfonso Múnera Cavadía, reconoció que hasta ahora el Mar Caribe se ha constituido más en un obstáculo que en una avenida para el progreso, es en ese sentido que convocó a los participantes de esta cumbre a avanzar en la creación de lazos de fraternidad y la identificación de negocios específicos en la región.
En ese sentido convocó a los participantes de esta cumbre a avanzar en la creación de lazos de fraternidad y la identificación de negocios específicos en la región.
En su oportunidad, el director ejecutivo de Promoción Internacional en ProMéxico, Carlos Fuentes Arriaga, dijo que los productos mexicanos tienen muy buena presencia en el Caribe, pero hay muchas oportunidades para crecer.
Recordó que las empresas mexicanas desde hace algunos años ya tienen presencia en el Caribe y no sólo las grandes compañías sino las medianas e incluso las pequeñas.
Además, detalló, en 2013 las inversiones mexicanas en el exterior ya son mayores que la Inversión Extranjera Directa recibida en México, sin embargo, la inversión en el caribe es comparativamente muy baja y es necesario incrementarla.
Para ponerlo en perspectiva ejemplificó que sólo en Phoenix, Arizona, la inversión mexicana es de cinco mil millones de dólares, y en forma comparativa, la Inversión Extranjera en el Caribe “no existe”, por lo que es necesario identificar oportunidades de inversión.