El secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Gerardo Ruiz Esparzaseñaló que harán “lo necesario para recuperar la marca” Mexicana de Aviación y ver “si alguien se interesa en usarla.”

 

En entrevista radial precisó que las acciones de la aerolínea las tiene actualmente un despacho de abogados.

 

Aseguró que eso es viable legalmente, aunque “lo veo difícil porque ya el nombre sufrió un deterioro y no tiene tan buen prestigio como lo tuvo antes, pero la verdad es que a mí sí me interesaría y voy a tratar de promover que vuelva a ver la marca Mexicana en el aire”.

 

Justa liquidación de empleados, buscan

 

Ruiz Esparza agregó que el nuevo objetivo de la dependencia en el caso será supervisar el proceso de liquidación de los trabajadores de la aerolínea.

 

Señaló que después de que se dio a conocer la resolución de quiebra de la empresa, el pasado 4 de abril, ahora viene un proceso de liquidación a cargo de un síndico, el cual designará la SCT con el objetivo de proteger los intereses de los trabajadores.

 

Explicó que la labor de la SCT en dicho proceso consistió en proteger el Centro de Mantenimiento (MRO) de la aerolínea y los aviones que tenía en garantía el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), para que cuando viniera la resolución, en este caso la quiebra, pudiera representar un ingreso a los trabajadores.

 

MRO volverá a dar servicio

 

En ese sentido, el titular de SCT mencionó que uno de los aspectos que aún tiene un valor relevante es el MRO, que fue la única compañía del grupo que logró su reestructura tras el concurso mercantil.

 

Para la base de mantenimiento, explicó, se espera que vuelva a dar servicio a las aeronaves bajo el mando de una nueva compañía.

 

En el caso de las aeronaves, señaló que debe verificar su buen funcionamiento pues llevan más de tres años sin operar, por lo que si se encuentran en buen estado se pueden incluir en el patrimonio que les corresponde a los trabajadores.

 

Abundó que en el caso de los acreedores, éstos entendieron claramente el problema y fueron solidarios con la postura del gobierno, de cuidar y proteger a los trabajadores, pues cedieron su derecho de cobro a un fideicomiso cuyos únicos beneficiarios son los trabajadores.

 

“En el momento que esto opere los ingresos que reciba el fideicomiso serán para administrar el patrimonio de los trabajadores, y para que se cuide la venta de los aviones en el momento dado”, pero los bancos cedieron su derecho de cobro en favor de los trabajadores, insistió.