La violación de sus derechos humanos, los secuestros y agresiones que sufren por parte del crimen organizado y la política persecutoria que ejerce el Estado sobre ellos, ha convertido la situación de los migrantes en un holocausto, acusó el padre Alejandro Solalinde.

 

Durante la presentación del informe “Narrativas de la Transmigración centroamericana en su paso por México”, que se da dentro del Día Internacional del Migrante, el padre y defensor de migrantes criticó que las cifras oficiales sobre los indocumentados desaparecidos son más bajas que las reales.

 

“Digan si no es un holocausto: más de 10 mil desaparecidos, y esta cifra es muy baja de lo que realmente es, que no han sido todavía aclarados”, comentó Solalinde,

 

Y agregó: “cuántas mujeres no han sido violadas, no han sido tratadas y cuántas personas no sabemos nada de ellas, si todo esto no es un holocausto yo no sé entonces que sea”.

 

El informe presentado en el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín PRO, indica que 52% de los migrantes centroamericanos sufren robo en territorio nacional, 33% es víctima de extorsión, 4% padecen privación ilegal de la libertad y 3% es objeto de amenazas.

 

El reporte, que fue resultado de la colaboración de siete albergues, indica que de enero a junio pasado se registró el paso de 21 mil personas por las distintas casas para migrantes.

 

Los números corresponden a los testimonios brindados por los propios migrantes, pues explicó Solalinde que la mayoría de los indocumentados no denuncia por temor a represalias.

 

Las entidades donde los migrantes sufren mayores agresiones son Chiapas, Veracruz, Tabasco, Oaxaca y el Estado de México.