En la primera quincena de noviembre de 2013, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó un incremento de 0.85% respecto a la quincena inmediata anterior, obteniendo una tasa de inflación anual de 3.51%, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

 

La inflación anual se mantuvo en línea con lo esperado por los analistas, que previeron que se mantuviera en niveles de 3.5%, dentro de la meta del Banco de México (Banxico) de 3.0 más/menos un punto porcentual; en el mismo periodo de 2012, el INPC subió 0.79% de variación quincenal y se ubicó en 4.36% anual.

 

El incremento quincenal de 0.85% es el mayor de todo el año y se debió al alza en los precios de la electricidad, jitomate, cebolla, chile serrano, gasolina de bajo octanaje, gas LP, huevo, chile poblano y servicios profesionales; en tanto, los productos que más bajaron sus precios fueron pollo, pepino y melón.

 

El INEGI añadió que el índice de precios de la canasta básica de consumo presentó un aumento de 1.68% en la primera quincena de noviembre de 2013 y una tasa anual de 4.36%, por debajo de las cifras de la misma quincena de 2012 que fueron de 2.03 y 5.25%.

 

El organismo agregó que el índice de precios subyacente registró en la quincena en cuestión un crecimiento de 0.11%, menor a la tasa que registró en el mismo periodo de 2012 cuando fue 0.18%.

 

En tanto, abundó en un comunicado, el índice de precios no subyacente aumentó 3.27%, mientras que en la misma quincena de 2012 fue de 2.79%. Dentro del subgrupo de mercancías y servicios subyacentes se observó un ascenso de 0.03% en el índice de precios de las mercancías y de 0.18% en el de los servicios, precisó.

 

Añadió que al interior del conjunto de mercancías y servicios no subyacentes, el índice de precios de los productos agropecuarios se elevó 2.34 por ciento; esto como consecuencia del alza en los precios de frutas y verduras en 6.03 por ciento; mientras que los precios de los productos pecuarios avanzaron 0.16 por ciento.

 

Por último, el subíndice de precios de los energéticos y tarifas autorizadas por distintos órdenes de gobierno reportó un crecimiento de 3.83 por ciento, debido principalmente a que concluyó el subsidio de la tarifa de verano de la electricidad en diez ciudades.