NACIONES UNIDAS.- Un grupo de organizaciones internacionales premiaron hoy al Tratado de Tlatelolco, que prohíbe las armas nucleares en la región de América Latina y El Caribe, por considerarla la mejor política de desarme sostenible en el mundo.

 

“Actualmente Latinoamérica es una de las regiones más seguras del mundo en lo que corresponde a conflictos nucleares, por lo tanto tiene más capacidad de concentrar sus recursos en la economía y el desarrollo social en vez de expandir una carrera armamentista nuclear improductiva que solamente sirve para minar la seguridad regional”, dijo Jakob von Uexkull, presidente fundador del Consejo para el Futuro Mundial.

 

En la sede de la ONU, se anunció que el Tratado de Tlatelolco, creado en 1967, recibió en una ceremonia celebrada este miércoles el “Premio de la Política del Futuro” 2013 por encima de otras 24 políticas nominadas.

 

Gioconda Ubeda, ex secretaria general de la Agencia para la Prohibición de Armas Nucleares en América Latina y el Caribe (OPANAL) y actual vicecanciller de Costa Rica, recibió la distinción en nombre de la región.

 

“Esta política, que se tomó hace casi 50 años, cambió la historia de América Latina y el Caribe y, por su puesto, de sus pueblos. Podemos decir que cinco generaciones se han visto afectadas positivamente por esta decisión política”, apuntó.

 

El Premio de Plata fue otorgado a Argentina por su programa nacional de 2006 de entrega voluntaria de armas de fuego y a la ley de Nueva Zelanda sobre una zona libre de armas nucleares, desarme y control de armamentos..
Por su parte, Costa Rica recibió Mención de Honor por la abolición de su ejército en el artículo 12 de la Constitución de 1949.

 

El premio es otorgado por el World Future Council, la Oficina de Asuntos de Desarme de Naciones Unidas (UNODA) y la Unión Interparlamentaria (UIP).

 

“El Tratado de Tlatelolco ganó el galardón de oro por su valiosa contribución al avance de la paz y la seguridad en la región y por servir como un precedente e inspiración para otras Zonas Libres de Armas Nucleares”, explicó la UNODA.

 

El diplomático mexicano responsable del tratado y ganador del Premio Nobel, Alfonso García Robles, consideró que el esfuerzo “aporta valiosas enseñanzas a todos los Estados que desean ampliar las zonas del mundo” libres de las armas nucleares.

 

El presidente del World Future Council, Jakob von Uexkull señaló que el Premio de la Política del Futuro “pone de relieve la importancia de las mejores prácticas en la elaboración de legislación y presenta ejemplos sobresalientes de planteamientos normativos”.

 

Angela Kane, alta representante de la ONU para asuntos de desarme, destacó por su parte que el premio de este año resaltaba de qué manera el desarme nuclear puede proporcionar beneficios generales al desarrollo sostenible.