La Procuraduría General de la República (PGR) abrió una averiguación previa por el homicidio de Rafael Arellano Félix, uno de los hermanos fundadores del Cártel de Tijuana, ante la posibilidad de que se trate de un hecho vinculado con la delincuencia organizada.
Autoridades federales indicaron que se cuenta con una línea de investigación que apunta a que este homicidio, perpetrado el pasado viernes, podría obedecer a una reorganización delictiva en la península de Baja California y a posibles ajustes de cuentas entre narcotraficantes.
Se presume incluso que pudo ocurrir una traición en el círculo más cercano de seguridad del capo, luego de que el homicidio se perpetró en un evento privado, y sin que hubiera respuesta o reacción aún después de cometido el crimen frente a decenas de personas.
De acuerdo con la PGR, en la región existe una disputa entre células criminales que si bien tienen nexos con el Cártel del Pacífico, también pelean por las rutas de trasiego de drogas y las zonas para cometer otros delitos.
Entre esos grupos se encuentran los afines con Ismael El Mayo Zambada, que según los trabajos de investigación cuenta con la mayor capacidad operativa. Históricamente han sido rivales de los Arrellano Félix.
El gobierno de los Estados Unidos y diversas organizaciones especializadas en temas de narcotráfico, sostienen que la organización delictiva de los Arellano Félix sufrió pérdida significativas tras las capturas o muerte de varios de sus líderes en los últimos años.
Aun así el crimen de Rafael Arellano cobra relevancia por la importancia que en su momento tuvo en la dinámica criminal. Además las autoridades no descartan que este hecho sea un mensaje o advertencia entre los cárteles.
El mayor de los hermanos Arrellano fue asesinado el viernes pasado en una fiesta. Los sicarios sabían la ubicación del capo. La planeación incluyo disfraces de payaso para pasar desapercibidos y una ruta de escape.
No hay operativo coordinado
Pese a ser una de las principales regiones para el tráfico de drogas hacia los Estados Unidos por tierra, aire y mar, en la península de Baja California no se aplica algún operativo coordinado como el que sí se realizó hace tres años, y que se mantiene en otras entidades.
Las acciones que estuvieron en marcha hasta antes del 2012, sobre todo en Baja California, permitieron en su momento reducir la violencia principalmente en la zona fronteriza.
En enero pasado el gobernador de Baja California, José Guadalupe Osuna Millán pidió al gobierno federal que se reinstalaran los puntos de control, pero la situación no ha cambiado.
DATOS
4
sicarios participaron en la ejecución del mayor de los hermanos Arellano Félix
4
años tenía de haber sido liberado en Estados Unidos y repatriado a México
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