Los cuerpos de los jóvenes secuestrados en el bar Heaven que no sean reclamados por sus familiares, podrían ir a la fosa común si así lo pide la Procuraduría capitalina, consideró el magistrado presidente, Edgar Elías Azar.
El magistrado aclaró que no hay ninguna urgencia para que los nueve cuerpos bajo custodia del Tribunal capitalino y que actualmente están en el Instituto de Ciencias Forenses (Incifo), tengan que ser retirados de ese órgano por alguna premura.
“Lo que procede jurídicamente es resguardarlos, protegerlos, en las condiciones que exige el protocolo de la Cruz Roja Internacional y seguirlos custodiando, esos cuerpos están a disposición de la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal y esperaríamos instrucciones de la PGJDF como de PGR”, afirmó.
Sin embargo, reconoció la posibilidad de que sean llevados a la fosa común, como se ha realizado en otros casos, de manera legal, si no son reclamados por alguno de los familiares y ya no forman parte de alguna averiguación previa que esté en curso.
Además que se pueden realizar nuevos estudios periciales para la identificación de los cuerpos de la 12 víctimas secuestradas y ejecutadas el 26 de mayo, cuando lo soliciten los familiares a través del Ministerio Público, el cual a su vez tendría que pedir al Incifo los estudios.
En este sentido el magistrado lamentó que los padres de las víctimas, cuyos cuerpos han sido plenamente identificados no los hayan reclamado, pero el Incifo seguirá resguardándolos el tiempo que sea necesario.
“Nosotros estaremos muy pendientes de cualquier actividad que concilie este nefasto interés de ver el cadáver del hijo ahí, en el Instituto de Ciencias Forenses, no debe ser nada agradable”, apuntó.
Recordó que el caso de San Fernando donde los restos de 140 víctimas permanecieron varios meses en los refrigeradores del Incifo, pero al final todos los cuerpos fueron entregados a sus familiares, el último de ellos, el de un ciudadano de El Salvador.
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