Para la economía mexicana y las inversiones en el país, 2013 va a resultar un año decepcionante, dijo Mario Correa, economista en jefe de Scotiabank.

            En entrevista con 24 HORAS, el economista afirmó que una serie de factores se combinaron para producir como resultado la desaceleración de la economía del país, la cual no se esperaba, por lo que el banco canadiense está revisando sus pronósticos económicos para 2013.

 

“Este año estamos pasando por un bache económico. El crecimiento va a ser bastante menor a lo que se esperaba a las expectativas de niveles del 3.5%. Estaremos alcanzando niveles de cerca al 1.5% o 1.6%. Estamos de hecho en proceso de revisar nuestros pronósticos, pero una vez superado este bache, en 2014 y 2015 deberíamos de alcanzar nuevamente tasas de crecimiento más importantes, por arriba del 3% o 3.5%”, calculó.

 

Entre los factores que resultaron afectando la economía mexicana, detalló Correa, está la baja en la demanda externa de ciertas exportaciones del país hacia el mundo.

 

También se registró un retraso en la ejecución del gasto público durante los primeros meses de la nueva administración del gobierno federal.

 

“Quizá un factor muy importante que ha influido en esta situación es la gran cantidad de cambios que se anunciaron generaron inquietud e incertidumbre y quizá una posición demasiado cautelosa en consumidores, en empresas, en inversiones, hasta no conocer cuáles son los cambios que efectivamente se van a dar.

 

“Todo este entorno es lo que ha desacelerado fuertemente la economía aquí en México y ciertos eventos en algunos sectores, especialmente en la construcción, han generado está caída tan fuerte, pero no creo que estamos en recesión. Sí estamos en un proceso de desaceleración importante”, expuso Mario Correa.

 

No obstante, estimó que a partir del cuarto trimestre, la economía mexicana debería ver una mejoría.

 

Cuestionado sobre las declaraciones de Steve Forbes, presidente y editor en jefe de Forbes Media International, quien criticó el lunes la decisión del gobierno federal de aumentar los impuestos en su propuesta de reforma hacendaria, Mario Correa consideró que todavía falta tiempo para conocer el resultado final de las reformas estructurales.

 

“Creo que la propuesta que se tienen ahorita está orientada fundamentalmente a conseguir estos mayores ingresos. En la medida que eso en el futuro reduzca la dependencia que tiene el gobierno en los ingresos petroleros y permita efectivamente tener un gasto eficiente y dirigido a atender necesidades sociales, podrá tener un impacto positivo de mediano y largo plazo sobre el crecimiento”, señaló.

 

“Todavía está por verse cuál va a ser la forma final que tomen las diferentes medidas que se han propuesto, e inclusive muchas de las medidas han resultado muy controvertidas. Probablemente vamos a tener un resultado diferente a lo que se conoce hasta el momento”, agregó.

 

Sin embargo, el economista afirmó que en la propuesta de reforma hacendaria, hubiera querido ver medidas concretas para combatir la actividad informal, uno de los grandes problemas que afecta directamente la economía de México.

 

“Eso le impide al gobierno captar y recibir ingresos y también es uno de los retos que enfrenta la banca para dar créditos. Ojalá hubiera más medidas orientadas a atender este problema de la alta actividad informal que hay en el país. Eso sería deseable ver en este tipo de reformas”, dijo.

 

Agregó: “En términos generales, el conjunto de reformas representan pasos adelante respecto a la situación que teníamos anteriormente. Hay todavía varias reformas que no están definidas por completo y habrá que ver cómo terminan siendo definidas para tratar de estimar cuál podría ser el impacto final que vayan a tener, pero en un principio, todas están de alguna forma orientadas a mejorar el funcionamiento de ciertos mercados y detonar un mayor nivel de crecimiento y de generación de empleos”.