Cuando los peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) acudieron el lunes al Cinépolis de Plaza Ermita para investigar las circunstancias de la muerte del niño Hendrik Cuacuas en una de las salas, ya sabían de antemano que muy probablemente encontrarían en el techo la explicación del homicidio.

 

Y es que para ninguna autoridad capitalina es un secreto que en esa zona del oriente de la delegación Iztapalapa es tradición, casi de cada fin de semana, que en las fiestas, reuniones, mítines o cualquier tipo de encuentro, se realicen disparos al aire con todo tipo de armas, desde pistolas escuadras, hasta subfusiles UZI y rifles AK-47 Cuernos de Chivo.

 

El problema es que esos disparos, al caer, cobran vidas, como la de Hendrik, quien fue alcanzado por una bala calibre 9 milímetros que entró por el techo de una sala del cine en Plaza Ermita, tras ser disparada durante una fiesta callejera en la colonia Santa María Aztahuacán, la noche del 2 de noviembre.

 

Datos de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina indican que tan sólo de 2011 a la fecha en Iztapalapa 38 personas han resultado lesionadas por proyectiles de bala, que se desconocen de donde vinieron. Otras personas han muerto, incluyendo este último caso.

 

Pese a ello, ninguna autoridad, ni capitalina ni federal, había implementado, hasta ayer, algún operativo o investigación encaminada a detectar y asegurar estas armas, algunas de las cuales son de uso exclusivo del Ejército y Fuerzas Armadas.

 

24 HORAS solicitó a la SSPDF datos precisos respecto al número de personas detenidas por disparar de forma indiscriminada en la zona oriente de la delegación Iztapalapa, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta.

 

También se requirió a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) el número de averiguaciones previas relacionadas por muertes y lesiones a causa de balas perdidas en la misma delegación, pero no fue proporcionado el dato.

 

A la vista de todos

 

Los disparos al aire son una realidad que los vecinos de Iztapalapa conocen, pero que también ha quedado expuesta a la vista de todos, en redes como YouTube, donde desde hace tres años se publican videos en los que se aprecia la forma indiscriminada en que son accionadas las armas durante fiestas callejeras en colonias, como Santa María Aztahuacán y Xalpa.

 

Por ejemplo, en un video titulado Día de Campo en Santa María Aztahuacán 2009 se aprecia a cuatro sujetos, en medio de otro grupo de personas, accionando al aire todo tipo de armas, desde pistolas tipo escuadra, hasta una escopeta y al final un fúsil Ak-47.

 

En otro video, titulado aztahuacán 2010, se observa a los asistentes a un concierto al aire libre con un grupo de banda, en el que varios hombres disparan al aire, lo que ocasiona que incluso algunas personas se agachen, pero sin que se interrumpa en ningún momento el evento.

 

Vecinos de la zona coinciden en señalar que cualquier tipo de evento o festividad, desde fiestas patronales hasta algún festejo de quince años o cumpleaños, deriva en concentraciones en las calles en las que se realizan disparos al aire, y que a veces derivan en riñas o enfrentamientos.

 

“Lo triste es que ya nos hemos acostumbrado a esto, de que casi cada fin de semana hay balazos y luego hasta en las azoteas aparecen las balas; la policía si sabe pero la verdad no se atreven a meterse a pararlos”, dijo a 24 HORAS Cristina Salcido, vecina de la colonia Santa María Aztahuacán.

 

Ahogado el niño…

 

Tuvo que ocurrir el caso de la muerte dentro del cine para que ayer, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, ordenara la puesta en marcha de un operativo de revisión de personas que estuvieran armadas en las colonias Xalpa y Santa María Aztahuacán.

 

”Necesitamos saber que ocurrió y llegar con el responsable. Se les ordenó que hagan un operativo en toda la zona. Se va a estar revisando a todo el mundo, se van a estar decomisando armas; necesitamos buscar el arma en la zona circunvecina”, dijo.

 

En un comunicado, la PGJDF comentó que se habían desplegado a 500 Policías de Investigación quienes hicieron recorridos casa por casa, preguntando a los vecinos sobre personas armadas y los eventos de disparos al aire en la zona.

 

Hasta el cierre de esta edición, no se había dado a conocer algún resultado positivo de ese operativo.

 

Encuentran 16 ojivas en Cinépolis de Ermita

 

Un empleado de mantenimiento del complejo de Cinépolis en Plaza Ermita, donde el pasado 2 de noviembre murió un niño tras ser alcanzado por una bala perdida, entregó a la PGJDF un total de 16 ojivas de distintos calibres, que había recogido en distintas fechas en el techo del complejo.

 

En un comunicado, la PGJDF indicó que el trabajador dijo a los policías que luego de días feriados en los que había fiestas en el barrio, era común encontrar goteras en el techo del cine, por lo que al revisar el mismo, se encontraban los cartuchos percutidos.

 

La dependencia capitalina indicó que las ojivas entregadas por el empelado fueron enviados al laboratorio de balística para su revisión.

 

La Procuraduría capitalina aclaró por otro lado que el cartucho que fue encontrado por los peritos de la PGJDF el pasado lunes en el techo de la sala 2 del cine, era calibre 38 y no 9 milímetros como el que hirió mortalmente al niño Hendrik Cuacuas, por lo que se descartó que proviniera de la misma arma homicida.

 

El complejo de Cinépolis en la Plaza Ermita continuaba fuera de servicio, luego de que la noche del martes fue clausurado pro la delegación Iztapalapa, debido a irregularidades en sus medidas de protección civil.

 

Descartan detectores

 

El director general de Cinépolis, Alejandro Ramírez, descartó que la empresa vaya a instalar detectores de metales en sus complejos, pues dijo que afortunadamente en México no hay casos de personas armadas que ingresen a los cines, y recordó que la bala que le costó la vida al niño en el complejo de Ermita, provino desde fuera de las instalaciones.

 

En una conferencia de prensa, confirmó que apoyará económicamente a la familia de Hendrik Cuacas, y consideró que es necesario hacer conciencia de los peligros que puede ocasionar el disparar de forma impune un arma de fuego. Pidió a las autoridades capitalinas actuar en la materia. ARTURO ÁNGEL