La posibilidad de que el control de la Policía Federal regrese a la Secretaría de Gobernación y la creación de una Gendarmería, integrada por militares bajo un mando civil, fue celebrada por activistas, especialistas y legisladores, quienes coincidieron en que abatir los niveles de inseguridad en el país deberá centrarse en el trabajo que se haga en los estados y municipios.

 

24 HORAS publicó ayer que la próxima administración federal, que encabezará el presidente Enrique Peña Nieto, analiza un proyecto para crear una Gendarmería, instituir la figura de un zar de Inteligencia, y desaparecer la Secretaría de Seguridad Pública Federal, cuyas funciones operativas regresarían a la Secretaría de Gobernación.

 

María Elena Morera, presidenta de la organización civil Causa en Común, y supervisora de los avances del Acuerdo por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad, reconoció que la figura de la Gendarmería, constituida por militares que han participado en tareas de seguridad pública, resultaría útil sobretodo en localidades que carecen de una policía confiable.

 

“Sería un grupo de fuerza del Ejército que se lleva hacia la fuerza civil con un mando civil, sobretodo para municipios que son muy pequeños, que no tienen la capacidad de tener una policía municipal que realmente esté profesionalizada y que funcione”, expresó.

 

La activista, que ha participado en las mesas de trabajo sobre seguridad con el equipo de transición que encabeza Miguel Ángel Osorio Chong, confirmó que se trata de una alternativa que puede resultar positiva, aunque dijo que es importante que se verifique su aplicación.

 

“Tenemos actualmente 17 estados donde el secretario de Seguridad Pública es un militar retirado, porque da una mejor imagen, pero eso no significa que el militar retirado sepa de seguridad, o sea que hay que tener cuidado”, señaló.

 

Respecto a la probable migración de la Policía Federal a la secretaría de Gobernación, Morera expresó que un cambio sería positivo siempre y cuando esté encaminado a fortalecer la corporación, pues consideró que no se “puede estar inventando el hilo negro” y deshacer el trabajo que se ha venido realizando.

 

Con independencia de que Gobernación controle a la Policía Federal, Morera indicó que se trata de un corporación incipiente, que debe fortalecerse con controles internos y una capacitación, que evite que se presenten casos como el de la agresión a agentes estadunidenses cerca de Tres Marías, o la balacera entre agentes en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

 

Gobernación debe retomar seguridad

 

Por su parte, el investigador del Departamento de Estudios Jurídicos y Sociales del Tec de Monterrey, Vicente Fernández, consideró positivo que Gobernación retome las responsabilidades que le corresponden en materia de seguridad interna e inteligencia, así como la administración del sistema penitenciario.

 

Aunque subrayó la necesidad de rescatar el trabajo del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), el cual, a su juicio, sólo ha existido en los últimos años en el papel, pues no se aprecia algún logro ni resultado del trabajo de inteligencia que debería estar realizando.

 

El trabajo mas intenso, apuntó Fernández, debe encaminarse finalmente a las entidades federativas y los municipios, donde se cometen la mayoría de los delitos. El investigador incluso, planteó la posibilidad de que se retome el modelo de la policía única.

 

“Por lo que sabemos peña Nieto se está asesorando con el general Oscar Naranjo, es una buena oportunidad de adoptar cosas que se hicieron bien en el modelo colombiano, donde se lograron sanear corporaciones que estaban penetradas por la corrupción, como sucede en México”, subrayó.

 

Modelo francés

 

Para el presidente de la comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, el panista Guillermo Anaya, la posible desaparición de la Secretaría de Seguridad Pública y el traslado de algunas funciones a la de Gobernación sería una medida apropiada, siempre y cuando sea similar al régimen que tiene Estados Unidos o Francia.

 

El legislador anotó que la opción de regresar nuevamente a la Segob las facultades de seguridad es correcta, siempre y cuando se ponga al mando a un ministro de seguridad y no al propio titular de la dependencia. “El secretario no puede atender la política interior y las acciones de seguridad”.

 

Anaya dijo que al tratarse de un tema prioritario y que tanto demandan los ciudadanos debe ser atendido en su totalidad, por lo que de crearse la figura de un zar de inteligencia, y la gendarmería, ambos deberían gozar de autonomía, aun cuando pertenezca a Gobernación.

 

Señaló que no debe dejarse de lado la Plataforma México, que se impulsó en este sexenio y que ha beneficiado al país en materia de seguridad; asimismo dijo, que la conformación de la SSP fue buena, ya que gracias a ellos aumento el número de elementos de seguridad de 3 mil a 35 mil en todo el país.

 

El legislador puntualizó que se debe concretar el mando único para que la política de seguridad se dirija bajo un esquema en el cual participen los gobiernos federal, estatal y municipal.