La dirigencia nacional del PRD acordó reunirse con los gobernadores de la izquierda a mediados de la próxima semana ante la molestia que causó la reunión de los mandatarios con el presidente electo, Enrique Peña Nieto.

 

Para la senadora Dolores Padierna, dirigente de la corriente Izquierda Democrática Nacional, el problema de fondo tiene que ver con la manera en que los gobernadores de Oaxaca, Guerrero, Morelos (Gabino Cué, Ángel Aguirre y Graco Ramírez) así como los electos de Tabasco y Distrito Federal (Arturo Núñez y Miguel Mancera) establecen relación con Peña, aun antes de asumir funciones como titular del Ejecutivo.

 

“No me gusta, en primer lugar porque todavía no es presidente y es darle legitimidad a algo que sólo dan las urnas y el voto popular. Voy a platicar con ellos para ver cuál es la motivación que tienen para verlo en estas circunstancias cuando Peña Nieto acaba de declarar que va a privatizar Pemex y subir el IVA. No podemos evitar que sea presidente pero no lo podemos legitimar”, aseguró.

 

Las inconformidades de las tribus por la reunión tuvieron repercusiones al interior de la Comisión Política Nacional, donde hubo reclamos contra la determinación de Jesús Zambrano, presidente nacional del partido, de avalar el encuentro sin tomar en cuenta a la dirigencia del sol azteca.

 

“Como es natural, hay opiniones diversas, pero el acuerdo común es que trabajemos en unidad, que tengamos prudencia, lo analicemos de manera colectiva y platicar con los gobernadores, de tal forma que no se profundice más la posibilidad de una crisis”, señaló Alejandro Sánchez Camacho, secretario general del PRD.

 

En el mismo tono, Zambrano reconoció que las diferencias al interior de la Comisión Política forman parte de la pluralidad del PRD, y por ello, buscarán unificar la postura que asumirán frente a Peña tras reunirse con los gobernadores de las izquierdas a mediados de la próxima semana.

 

Por otra parte, la dirigencia del sol azteca revisó el proceso electoral a realizarse en 19 estados de la República para elegir delegados al Congreso Nacional, consejeros nacionales y estatales, principalmente en las entidades de Michoacán, Tlaxcala, Nuevo León y Tamaulipas.

 

Dicho proceso ha generado tensiones entre las tribus del PRD ante la posibilidad de que la elección genere un reacomodo de fuerzas al interior del partido, lo cual generaría una crisis interna que podría derivar en impugnaciones y protestas a dos meses de que se celebre el Congreso Nacional del PRD a mediados de diciembre próximo.