Dirigentes del Movimiento Progresista se reunieron con magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ante quienes insistieron en su petición de invalidar la elección presidencial y calificarla conforme a derecho.

 

Los magistrados María del Carmen Alanís y Pedro Esteban Penagos recibieron a los líderes nacionales de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, y del Trabajo (PT), Alberto Anaya, así como a Luis Miguel Castro, representante de Movimiento Ciudadano.

 

El dirigente perredista dijo que no podrían acatar una resolución “a ciegas”, sino que tendrían que “valorarla en su momento”, y además el tribunal electoral federal tendría que considerar los elementos de prueba que presentaron para invalidar la elección.

 

Por tanto, manifestó Zambrano, la izquierda valoraría las acciones a seguir una vez que se analicen a fondo los argumentos de los magistrados.

 

Los dirigentes pidieron a los magistrados analizar también las pruebas de la Unidad de Fiscalización del Instituto Federal Electoral (IFE), sobre los presuntos rebase del tope de campaña del candidato Enrique Peña Nieto, el uso de recursos de procedencia ilícita y el “lavado” de dinero.

 

Zambrano Grijalva advirtió que “el país no está para bollos” y aunque el partido del Sol Azteca no promoverá ningún estallido social, hay gente inconforme.

 

En el mismo sentido, el dirigente nacional el PT dijo habría “consecuencias sociales graves” si la elección no es invalidada.