PEKÍN. La fiscalía de Hefei (capital de la provincia oriental de Anhui) acusó formalmente a Gu Kailai, esposa del ex líder chino Bo Xilai, y a su asistente doméstico, Zhang Xiaojun, del homicidio intencionado del británico Neil Heywood el pasado noviembre

 

Así lo anunció la agencia oficial Xinhua, añadiendo que “fueron recientemente imputados”, sin especificar cuándo, y que las investigaciones apuntan a que Gu y su hijo, Bo Guagua, tenían “conflictos con Heywood debido a intereses económicos”.

 

“Preocupada por las amenazas de Heywood a su hijo, Gu Kailai, junto a Zhang Xiaojun, envenenaron (al británico) hasta la muerte”, dice la citada agencia.

 

La fiscalía de Hefei “ya ha interrogado a los dos sospechosos y ha escuchado a la defensa”, y “los hechos son claros y las pruebas irrefutables y sustanciales”.

 

Aunque la agencia apunta que el día del juicio “está aún por decidir”, el abogado chino en derechos humanos Phu Zhikiang dijo que cree que “será muy rápido” y que “serán condenados a muerte” (el homicidio intencionado es uno de los 55 delitos susceptibles de ese castigo en China).

 

La acusación formal se produce más de tres meses después de que, el pasado 10 de abril, Gu y Zhang fuesen declarados “altamente sospechosos” de la muerte de Heywood, amigo de la familia.

 

Entonces, y de forma casi simultánea, Xinhua también reveló la suspensión de Bo Xilai del Politburó y del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) por “supuestas irregularidades”, sin vincular ambos casos.

 

El escándalo, uno de los mayores de la escena política china en décadas, se desató el pasado febrero cuando el vicealcalde de Chongqing (centro) y mano derecha de Bo (jefe del Partido Comunista en esa ciudad), Wang Lijun, pidió asilo en el consulado de EU en la localidad de Chengdu (próxima a Chongqing).

 

Allí Wang (que también podría ser condenado a muerte si se le acusa de traición al Partido Comunista) denunció, supuestamente, la mala praxis de Bo y los vínculos de Gu con la muerte de Heywood.

 

Hasta entonces, las autoridades chinas habían corrido un tupido velo sobre la muerte de Heywood, e incluso llegaron a sugerir que se había debido a una ingesta excesiva de alcohol, a pesar de que familiares del británico aseguraron que él era abstemio.

 

La imputación de Gu y su asistente llega mientras el arquitecto francés Patrick Devillers, cercano a la familia Bo, “se encuentra en China”, donde “sigue dispuesto a colaborar con la justicia” en este caso.