Si intentan robar la elección encontrarán a un “Tabasco bien calientito”, advirtió Arturo Núñez, candidato del PRD, PT y Movimiento Ciudadano al inicio de su campaña para gobernador, en donde Andrés Manuel López Obrador sólo fue parte de su discurso.
El perredista aseguró que la elección en Tabasco, que es concurrente con la presidencial, terminará en tribunales y dejó abierta la posibilidad de un conflicto postelectoral.
“Si pretenden robarse la elección van a dejar un Tabasco bien calientito y aquí ya tenemos calorcito para que nos agreguen pasión política”.
Como uno de los fundadores del Instituto Federal Electoral, Arturo Núñez dejó claro que él prefiere los cauces institucionales, pero agregó “la gente está muy a la expectativa del cambio, son 83 años de gobiernos del PRI, en ese sentido la gente está esperando la alternancia”.
En esta entidad donde la selección de los candidatos provocó fuertes fricciones en el PRI y el PRD, Arturo Núñez inició solo su campaña. Andrés Manuel López Obrador prefirió ir a Tlapa, Guerrero. Sólo estuvieron con él Jesús Zambrano, presidente del PRD, y Manuel Camacho, coordinador del Diálogo por la Reconstrucción de México.
Ricardo Monreal, coordinador de la campaña presidencial de López Obrador, vino un día antes y sólo estuvo en el primer evento de campaña, el acto de unidad de las izquierdas donde dio a conocer un mensaje de López Obrador; cuando se realizó el acto masivo con mujeres, el senador se había ido.
Hace seis años Raúl Ojeda estuvo acompañado por López Obrador en muchos de sus eventos, la elección fue precisamente tres meses después de la presidencial y ganó el PRI.
En conferencia de prensa, Núñez hizo fuertes críticas al gobierno de Andrés Granier al que acusó de ser muy pasivo ante el narco, porque dijo que muchos de los delitos de la delincuencia organizada en el estado tienen que ver con el fuero común, porque principalmente son extorsiones y secuestros.
Con ironía, agradeció al gobernador Andrés Granier porque con su mal gobierno parece que lo está apoyando, ya que el desencanto por su negligencia y corrupción es del mismo tamaño de las expectativas que tenía en el arranque.
Se quejó de los ataques del gobierno contra su campaña y afirmó que contiende contra Enrique Peña Nieto, ya que los priistas a nivel nacional hacen una campaña para asegurar que el triunfo en Tabasco es un problema de seguridad nacional, porque si gana el PRD tomaría los pozos petroleros.
La campaña durará únicamente de 45 días y los principales contendientes, PRI y PRD, tendrán que resolver primero sus problemas internos para poder ganar a sus contrincantes.