El ex secretario de Relaciones Exteriores, Jorge Castañeda Gutman, lamentó que en México mueran miles de personas para evitar que la droga llegue a la sociedad estadunidense.

 

Durante su participación en el foro internacional “Un balance a un siglo de su prohibición”, cuestionó que si el efecto de las drogas en la sociedad estadunidense es tan nocivo, por qué en México “tenemos que poner 60 mil muertos” para que les llegue menos droga.

 

Castañeda se refirió a las cifras divulgadas por el ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de Estados Unidos, Arturo Valenzuela, quien calculó en 209 mil millones de dólares al año el impacto del consumo de drogas en el vecino país del norte, en costos de problemas de salud, productividad y de acciones criminales.

 

Dijo que la mitad de los crímenes en Estados Unidos tienen que ver de alguna manera con drogas y que hay 40 mil muertos al año por consumo de enervantes.

 

Jorge Castañeda subrayó que “si lo que Arturo dice, el efecto de las drogas sobre la sociedad norteamericana es cierto, yo no lo comparto, pero lo concedo”, lo que arrancó los aplausos de los asistentes en el foro.

 

Detalló que de acuerdo con las cifras gubernamentales hasta septiembre pasado había 47 mil muertos en torno a esta lucha, pero podría aumentar a 60 mil fallecidos en la administración.

 

Así, Arturo Valenzuela puntualizó que comparte plenamente la frustración que siente la ciudadanía mexicana al impacto sobre un fenómeno que en el fondo también es producto de lo que ocurre en otros países.

 

Sin embargo, subrayó, el gobierno estadunidense ha mostrado señales de que éste es un tema de responsabilidad compartida, que basa sus esfuerzos en la noción de cooperación y responsabilidad compartida y ya no es sólo un tema policial sino que la óptica tiene que ser una estrategia integral.

 

Reconoció que el Estado debe hacer cumplir la ley, pero también se tiene que buscar el desarrollo de la sociedad.

 

Al respecto mencionó que el fortalecimiento de la estrategia denominada “Desarrollo alternativo”, busca impulsar que comunidades dedicadas al cultivo de la coca lo hagan en otro tipo de productos.

 

Para ello, resaltó, se tienen que involucrar autoridades locales, empresarios, sociedad civil y la misma sociedad para que existan mecanismos en los que se pueda explotar el nuevo producto cultivado y que entre a la cadena económica.

 

Finalmente puntualizó que hay que seguir una estrategia de cambio integral y multifacética, que se tiene que dar en el marco de un esfuerzo internacional y conjunto de manera respetuosa. (Notimex)