El gobierno de Kuwait presentó hoy su renuncia al emir Sabah al Ahmed al Sabah, en medio de denuncias de la oposición contra del primer ministro, Nasser al-Mohammad al-Sabah, por supuestos actos de corrupción.

 
“El gobierno kuwaití presentó su renuncia, que fue aceptada por el emir”, confirmó el diputado opositor islamista Jaled al Sultan en declaraciones a la prensa a su salida del Parlamento, según un reporte de la cadena árabe Al Arabiya.

 

 

Diversos grupos de la oposición, incluidos estudiantes liberales, islamistas y por primera vez los jefes tribales, convocaron a una concentración masiva para este lunes en el centro de Kuwait para exigir que el jeque Nasser responsa a las acusaciones de corrupción.

 

 

El primer ministro de Kuwait es acusado de transferir fondos públicos a varias de sus cuentas en bancos extranjeros y de entregar sobornos a unos 15 diputados progubernamentales por 350 millones de dólares, a cambio de su silencio.

 

 

Al Sultan explicó que la dimisión se produjo tras un encuentro entre el emir y los miembros del gobierno, aunque no precisó si el emir ha tomado alguna decisión sobre la posible disolución de la Cámara de Representantes.

 

 

Con la renuncia del gabinete, el emir kuwaití está obligado a disolver el Parlamento y convocar a elecciones, para designar a un nuevo gobierno, aunque por ahora la prioridad de al Sabah es evitar un agravamiento a la crisis de gobierno, según Al Arabiya.

 

 

El pequeño emirato petrolero es amenazado con sumergirse en una grave crisis, ante la reciente dimisión de los ministros de Justicia, Salud y Desarrollo y el incremento de las protestas que, desde hace meses, protagonizan cientos de personas ante el Parlamento contra Nasser.

 

 

A principios de octubre pasado, el ministro de Asuntos Exteriores, Mohamed Salem al Sabah, renuncio tras ser acusado de corrupción por pagar sobornos a varios parlamentarios para “ganar su lealtad”.

 

 

Después de una gran manifestación, encabezada por los líderes de la oposición, el 17 de octubre pasado, miles de personas irrumpieron en la sede del Parlamento exigiendo la dimisión inmediata del primer ministro.

 

 

El buen nivel de vida que tiene la gran mayoría de la población había aislado a Kuwait de la oleada de revueltas árabes que se han registrado desde principios de año en varios países, sin embargo, ahora parece que las protestas son la opción para expulsar a Nasser.

 

 

El primer ministro kuwaití había sobrevivido a tres votos de confianza en el Parlamento desde que asumió la jefatura de gobierno en 2006.