Ayer el dólar cerró a 14.17 pesos en el mercado bancario al mayoreo, una paridad que no se había visto en los mercados locales desde los aciagos días de febrero y marzo de 2009 cuando llegó a cotizarse en 15.35 pesos.

 

En aquellos meses el valor del peso –y de otras monedas de países emergentes- se desmoronó afectado por la caída de la economía estadounidense y la incertidumbre que prevalecía por una inminente quiebra de la banca estadounidense obligando al banco central a intervenir el mercado cambiario hasta con 20 mil millones de dólares de las reservas internacionales a través –entre otros mecanismos- de ventas directas de dólares a los bancos comerciales.

 

En aquellos meses cundió el pánico en los mercados y el nerviosismo se apoderó de las autoridades financieras. No era para menos. En seis meses el peso se había devaluado 44% frente al dólar, el doble de la devaluación sufrida por el real brasileño y cuatro veces más que la depreciación del peso chileno frente a la moneda estadounidense.

 

En el caso mexicano, más allá de los agobiantes factores externos, fueron las abultadas deudas corporativas nominadas en dólares, la crisis que estalló en las tesorerías de algunas empresas, la caída en las ventas petroleras y la llegada de menores remesas, las que configuraron un coctel explosivo que secó la oferta de dólares en el mercado local y prácticamente lapidó al peso. Entonces había razones de mucho peso para preocuparse.

 

Ahora los factores que están incidiendo en la paridad peso-dólar y en la depreciación que ha sufrido nuestra moneda del 20% en los últimos 4 meses, son atribuidos fundamentalmente a la volatilidad de la economía mundial y a sus expectativas. Podemos decir esto porque el fenómeno también está ocurriendo, en parámetros similares, con monedas de otros países emergentes. Así, los factores internos tienen una incidencia menor en la paridad peso-dólar del mercado cambiario local.

 

Sin embargo ello no quiere decir que deje de preocupar la alta exposición de la deuda interna de largo plazo a los volátiles capitales extranjeros y una posición fiscal que sigue siendo vulnerable a los precios internacionales del petróleo.

 

En el corto plazo no se avizoran signos de mayor estabilidad y crecimiento para la economía global y sí factores que podrían deteriorar aún más sus perspectivas, por lo que es muy probable que el peso siga resintiendo fuertes presiones en lo que resta del año.

 

 

SÍGALE LA PISTA…

  1. VERSIONES. Dionisio Pérez Jácome, secretario de la SCT, dijo ayer que no han llegado inversionistas serios interesados por Mexicana. Esta opinión del secretario contradice lo dicho públicamente por el juez que lleva el caso, Felipe Consuelo Soto, quien denunció amenazas veladas a los inversionistas interesados.
  2. SALIDA. Raúl Argüelles, vicepresidente senior de Asuntos Corporativos de Wal-Mart para México y Centroamérica, dejará la empresa el próximo 31 de diciembre después de 8 años de laborar en la cadena de tiendas más grande del país.
  3. ESTRATEGIA. La operación de compra de Telmex por América Móvil mejorará el perfil y valor de ésta última, que es la empresa con mayor potencial de rentabilidad futura para Carlos Slim.

 

samuelgarcia2010@hotmail.com | @arena_publica