María Elena Orantes es clara al decir que no se va del PRI por el simple hecho de que la dirigencia nacional ha impuesto al senador del Partido Verde Manuel Velasco, como candidato a la gubernatura de Chiapas.

 

“No está en este momento, no está mi posibilidad de irme a otro partido, la descarto tajantemente, a lo único a lo cual yo llamo, lo que ha sido mi discordia, mi lucha, lo que es mi voz, es el espacio para las mujeres y la oportunidad de la competencia para no confundir una cosa con otra y que no terminemos las mujeres como siempre: con conflictos emocionales”, comenta en entrevista.

 

La senadora chiapaneca se enfrenta actualmente a la imposición que desde la presidencia priista que dirige Humberto Moreira, se ha hecho presente en Chiapas.

 

Y es que el PRI, en su coalición con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido Nueva Alianza (Panal), ha entregado distintas candidaturas a sus partidos de alianza, hecho con el cual algunos priistas han manifestado su descontento.

 

“Toman decisiones cupulares y decisiones del centro en torno a la gubernatura de Chiapas. En mi calidad de militante priista con 10 años de carrera parlamentaria, todos mis cargos han sido por mayoría, por eso tenemos una exigencia justa: que podamos contender aquí (para la candidatura en Chiapas), aquí ni siquiera hubo previa, una interna, fue avasallamiento de cúpulas, en este caso, del Presidente Moreira de tomar una decisión arbitraria y de decir que Chiapas entra en negociación de coalición con el Verde”, expresa María Elena Orantes.

 

La senadora argumenta que en las filas del PRI hay militancia sobrada y con experiencia, por ello, ella ha emprendido una lucha, que no rebelión, para exigir al líder de su partido que en Chiapas es necesario una contienda equilibrada, en donde haya competencia.

 

Para Orantes la decisión final sobre el hecho de que el ecologista Manuel Velasco será el candidato postulado para la gubernatura de Chiapas, no ha sido tomada del todo.

 

“A mí no me lo han dicho con nombre y apellido”, asevera, “la esperanza de poder albergar la solución para que pueda encontrarse una solución pacífica de diálogo, de civilidad”.

 

María Elena Orantes asegura que busca la mejor alternativa de solución en Chiapas. Lo que ella quiere es que el candidato emane de una competencia.

 

“Yo lo único que pido es que nos dejen competir a los priistas, desde hoy no nos pueden quitar de una oportunidad, de un proceso de dignidad para Chiapas, además, en mi calidad de mujer, en el género que represento 53% de población, yo quiero entender que esto no sea un olor a misoginia, porque finalmente donde están los rostros de las mujeres soy competitiva”, apunta.