El Instituto Nacional de Migración (INM) reportó que hasta ayer alrededor de 2.5 millones de migrantes de varios puntos de México regresaron de Estados Unidos para pasar las festividades de fin de año.

 

Gran parte de los connacionales se unieron a una caravana por motivos de seguridad, para evitar ser víctimas de la delincuencia organizada y de facilitación de ingreso. Estos lo hicieron desde ciudades estadounidenses como Nueva York, Oklahoma, Michigan, Chicago y Carolina del Norte, y tuvieron como destino los estados de Zacatecas, Hidalgo, Estado de México, Morelos y Oaxaca.

 

“Para evitar que los paisanos sean víctimas de la delincuencia organizada o extorsión, se les recomienda utilizar las rutas sugeridas y notificar de manera inmediata algún tipo de abuso”, precisó el INM en un comunicado.

 

En este marco, el 18 de diciembre, arribó a México una de las principales caravanas conformada por 262 automóviles, con más de mil paisanos a bordo que se concentraron en Laredo, Texas, para terminar su viaje en el municipio de Jalpan de la Serra, Querétaro.

 

Para los siguientes días, se contemplan el ingreso de más caravanas, una de ellas con destino a Zacatecas y otra que cruzará los estados de Oaxaca, Guanajuato y San Luis Potosí.

 

A su vez, en coordinación con autoridades de las secretarías de la Defensa Nacional, de Turismo, de la Policía Federal y de los Ángeles Verdes, el INM brindó apoyo y orientación a los connacionales durante su viaje.

 

“Como parte del Operativo Invierno del Programa Paisano 2014, el INM, en estrecha coordinación con autoridades de seguridad de los tres órdenes de gobierno y representantes de organizaciones de migrantes en Estados Unidos, implementó diversas acciones para garantizar la integridad física y patrimonial de paisanos que entran por vía terrestre al territorio nacional”, informó la dependencia federal.

 

Según migración el resultado de los operativos, desde hace casi seis meses, el ingreso de los connacionales al país se ha realizado sin incidente.