El cambio de Christophe Pierre de la nunciatura de México a Estados Unidos obedece a que el papa Francisco ve en él a un diplomático capaz de tender puentes de diálogo con quien resulte electo como nuevo presidente de la nación del norte, opinaron especialistas en religión.

 

El comunicólogo experto en religión, Roberto O´Farrill, explicó que la designación de Pierre como nuncio en Estados Unidos es porque el Papa requiere a un buen diplomático ante los aires de cambio que vienen en ese país, y el francés tiene el perfil conciliador adecuado para tal efecto.

 

Cuando termine la elección en Estados Unidos, Pierre deberá tratar “ya sea con Hillary Clinton, que es de la masonería más encumbrada, y está el otro loco de Donald Trump, por eso no la va a tener fácil. Por eso el Papa necesita un gran estratega diplomático y ese se llama Christophe Pierre”, dijo.

 

Pierre actualmente es nuncio en México, cargo que desempeña desde hace nueve años, lo cual lo convierte en el decano de los embajadores en nuestro país.

 

Por su parte, el académico del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, José Traslosheros, aseguró que la llegada de Pierre a la nunciatura de Estados Unidos servirá de puente con la comunidad latina, en tiempos donde Donald Trump adquiere más fuerza entre los estadounidenses.

 

Traslosheros coincidió en que no importa si llega Trump o Clinton a la Casa Blanca, ambos casos representan un escenario difícil para los católicos, porque uno trae un discurso de odio y la otra uno antirreligioso, por lo que el talento diplomático es necesario.

 

Pero esa diplomacia no sólo la tendrá que aplicar con los políticos, sino al interior de la Iglesia Católica de aquel país, la cual está dividida por grillas internas, añadió el académico de la UNAM.

 

Sobre la elección de un nuevo nuncio para México, Elio Masferrer, presidente de la Sociedad para el Estudio de las Religiones, comentó que pese a que la decisión final es del Papa, ésta debe de ser en consenso con el gobierno mexicano, en un proceso de selección muy discreto.

 

“El sustituto es una cuestión que se maneja con mucha discreción, hasta que los gobiernos llegan al acuerdo para el embajador. Además, el sustituto puede venir de muchas partes, el Vaticano tiene relaciones diplomáticas con más de 100 países y tiene un sistema de rotación intercontinental”, explicó.

 

Masferrer añadió que sea quien sea el que llegue como nuevo nuncio a México será una persona con amplia experiencia diplomática, ya que en el Vaticano tienen un cuerpo diplomático muy profesional con gente dedicada plenamente a esta carrera, por lo que no hay espacios para improvisados.