¿Cuál sería esa iniciativa a favor de “los niños con cáncer’’ que según Arturo Escobar fue la razón para que cinco diputados del Verde engordaran las filas de Morena y con ello el partido de López Obrador obtuviera la mayoría simple en la Cámara baja?

De acuerdo con el coordinador de los diputados verdes, el cambalache –ocurrido unas horas después de que Morena en el Senado votara a favor la licencia de Manuel Velasco para que retomara la gubernatura de Chiapas-, se dio porque solo entregando a esos cinco diputados a Morena el partido del tucán estaría en posibilidades de aprobar una iniciativa a favor de los niños con cáncer.

Pero no dijo de qué se trataba dicha iniciativa, ni si estaba lista ni cuándo podría ser presentada.

De hecho, la declaración suena a pretexto porque ningún diputado de cualquier partido estaría en contra de una iniciativa –la que fuera– si con ésta se pudiera ayudar a los niños enfermos.

¿Por qué Morena, favorecida con el intercambio, estaría en contra de una iniciativa –si es que la hay- con ese tema?

El discurso de los verdes se cae por sí solo.

Quizá lo de Escobar no extrañe, pero sí el silencio del presidente del Verde, Carlos Puente, cuyo papel en el Senado había sido sobrio, sin estridencias pero tampoco escándalos.

Habrá que esperar con ansías para conocer la famosa iniciativa cuyo objeto es ayudar a los niños con cáncer -¿aprobarán una partida especial, les facilitarán el tratamiento en instituciones privadas, apoyarán a sus familias, los llevarán al extranjero si es preciso, les regalarán el tratamiento?-, para saber el tamaño real del acuerdo con Morena.

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Ya se sabe que el rector de la UNAM, Enrique Graue, no tiene sello de duro ni mucho menos.

Y es que, pese a ser oftalmólogo de profesión no vio venir la avalancha de sucesos que ahora lo tienen en un pliego petitorio estudiantil para que renuncie.

Parece un exceso, pero también las autoridades de la UNAM han actuado con lentitud.

Primero, cuando se denunciaron públicamente los sitios de venta de droga en el campus universitario, salieron a decir que eran hecho asilados.

Tuvieron que ocurrir varios asesinatos y agresiones a reporteros que documentaban cómo ocurría el mercado de drogas para que por fin hicieran algo.

Ahora Graue informa que se expulsaron a 30 porros –que seguro están temblando de miedo-, pero no se conoce que haya denuncias penales en contra de ninguno de ellos pese a que hubo tres heridos por arma blanca.

Ni con “separar’’ al jefe de la dizque vigilancia de la UNAM se resuelve el asunto.

Se requieren otras medidas que al parecer Graue no está en condiciones de tomar.

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Por lo menos una buena para el gobierno que se va.

Representantes la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Banco Mundial reconocieron la labor de los programas sociales aplicados por el Gobierno Federal a través de la Secretaría de Desarrollo Social.

Eviel Pérez Magaña se reunió, en uno de los comedores comunitarios ubicado en Lerma, estado de México, con Antonio Molpeceres, coordinador del Sistema de Naciones Unidas y representante del PNUD, quien destacó los avances de México en la instrumentación de programas y acciones, en beneficio de las comunidades en condición de vulnerabilidad.

Bien.