Foto: Gabriela Esquivel Se han llegado a recolectar en una temporada de verano cerca de 180 millones de toneladas, por lo que resulta urgente que instancias como el Conacyt, la Conabio, Sagarpa y las universidades estudien posibles usos benéficos. “Es un gran reto para el próximo Gobierno federal”, afirmó Gerardo Ceballos, del Instituto de Ecología de la UNAM  

Sargazo seguirá llegando; urgen a estudiar cómo aprovecharlo (+Infografía)

La alta concentración de sargazo en costas del Caribe mexicano continuará con mayor impacto en los próximos años, pues es una consecuencia del cambio climático y lo que urge es acelerar los estudios para determinar cómo se puede aprovechar esta alga.

Así lo expuso Gerardo Ceballos González, investigador del Instituto de Ecología de la UNAM, quien precisó que este fenómeno ya no es atípico, ya que es consecuencia de la actividad humana que ha impactado con el calentamiento global.

El experto instó a los gobiernos federal, de los estados y los institutos de enseñanza superior a establecer un plan de estudios científicos para saber si el sargazo se puede utilizar como abono en la tierra, como alimento para los animales, para cosméticos o fines farmacéuticos, generar energía eléctrica (ya que al descomponerse produce emisiones de metano) o para crear capas en las playas que ayuden a evitar la erosión de las mismas.

“Este fenómeno es consecuencia de la actividad humana en el planeta, y a partir de ahora lo anormal ya es normal; este tipo de invasión del sargazo será ahora la normalidad, tiene que haber ahora mucha creatividad de autoridades y expertos para darle un uso positivo y para establecer un plan de adaptación. Esto va a estar ocurriendo constantemente en el futuro, y cada año nuestras costas del Caribe, en Quintana Roo y hasta en el Golfo de México, estarán cubiertas por este vegetal”, afirmó.

“Estas algas se encuentran entre África y Sudamérica, y su presencia en las costas históricamente siempre han estado; Cristóbal Colón, en su misión al continente americano las conoció, pero ahora son grandes concentraciones y debemos adaptarnos a este fenómeno, pero de una forma positiva”, indicó.

El también miembro de la National Academy of Sciences de Estados Unidos dijo que cada vez los mares están más calientes y las corrientes marítimas son más intensas para enfriar el agua; esto provoca masivos barridos de esta alga, alcanzando concentraciones récord en la superficie de las aguas del Atlántico y el Caribe.

Para Gerardo Ceballos, una acción inmediata podría ser contener el sargazo con el uso de boyas y redes en mar abierto antes de que llegue a las playas lo que impacta seriamente al turismo.

“Sería como una técnica que se emplea para contener en el mar los derrames de combustible. Además, las técnicas para la limpieza de las playas deben ser con mucho cuidado para no hacerlo cerca del arrecife y para evitar dañar las áreas con nidos de tortuga”, agregó.

Ceballos González recordó que la NASA detectó a principios de este mes una concentración de sargazo en una superficie de dos mil 800 kilómetros cuadrados en el Océano Atlántico.

“Hace dos años se recolectaron en las costas del Caribe mexicano y de otros países aproximadamente 180 millones de toneladas de sargazo, y por eso se urgen estudios del Conabio, el Conacyt, Sagarpa, Semarnat y de las universidades para encontrar los usos benéficos de esta alga”, enfatizó.

Y abundó: “Se requiere de una gran trabajo de previsión y de un plan o programa de adaptación al cambio climático, y este fenómeno es un reto para el próximo Gobierno federal, así como para las autoridades estatales, como es el caso de Quintana Roo”.

LEG