En medio de disputas internas y fuga de militantes, la presidenta del PRD, Alejandra Barrales, sumó una nueva polémica, debido a que omitió declarar en su 3 de 3 la compra de un departamento en Miami con valor de 14.6 millones de pesos.

 

El canal de televisión Univisión dio a conocer este lunes que la líder del partido de izquierda compró el inmueble en 2015 a través de la empresa Maxba Development Inc, firma que fue creada en Miami y pertenece a Albama Transportes; en ambas, Barrales es la principal accionista.

 

A raíz de la investigación y previo su difusión, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) recibió un escrito de Barrales, el 17 de marzo pasado, para que se modificarán sus declaraciones de intereses, patrimonial y fiscal e incluyeran la posesión del departamento en Miami.

 

De acuerdo con los documentos que ingresó en 2016 a la plataforma, la líder del Sol Azteca incurrió en omisiones e inconsistencias, pues declaró ser accionista de Albama, pero olvidó mencionar la firma que creó en Miami y la compra del departamento.

 

En 2015, Barrales declaró ingresos totales por 12.4 millones de pesos, es decir, una cifra menor al departamento que compró.

 

La dirigente perredista también evitó transparentar que obtuvo un crédito con un banco estadunidense para costear la mitad del precio del inmueble.
Las 3de3 de líderes de partidos, sin actualizar
Las declaraciones fiscales, de intereses y patrimoniales de los líderes de los principales partidos están desactualizadas, y en algunos casos, datan de hace tres años.

 

De acuerdo con una revisión a la plataforma 3de3, impulsada por el IMCO, la de Ricardo Anaya es la que presenta mayor rezago, pues fue presentada en noviembre de 2015 y contiene datos patrimoniales, de ingresos y fiscales de 2014.

 

Enrique Ochoa, del PRI; Alejandra Barrales, del PRD, y Andrés Manuel López Obrador, de Morena, las presentaron entre abril y octubre de 2016 y los datos que ingresaron corresponden a 2015.

 

La plataforma 3de3 es un proyecto donde los políticos transparentan de manera voluntaria sus ingresos y patrimonio mediante un mismo formato y no existe obligatoriedad para que actualicen su información cada año.