Credit: X / SpongeBob

Puede ser que Bob Esponja –ese personaje esponja de pantalones cuadrados– sea una de las series animadas más populares de todos los tiempos por muchas razones, y una de ellas es uno de sus personajes más entrañables: Calamardo. Aunque para muchos puede ser un personaje soso o gris, es uno de los más importantes en esta historia.

Lamentablemente, muchas de las cosas que le suceden a Calamardo Tentáculos, personaje creado por Stephen Hillenburg, son desafortunadas. Sobre todo para él, pues no se salva de nada, ni siquiera en su moái está a salvo de sus inesperados momentos.

Recordemos primero que es un personaje más bien opaco, malhumorado, sin matices, triste y melancólico, pretencioso, superior, egocéntrico. Todo lo malo, pues. Incluso podríamos pensar que todo lo malo que le pasa pudiera merecerlo, pero, ¿quiénes somos nosotros para juzgar?

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Te dejamos un pequeño top de sus momentos más horribles:

  1. La ocasión en que su abuso de poder se juntó con la desconfianza y la ansiedad y la mezcla devino en un mental breakdown. Se trata de esa vez que estuvo a cargo del Crustáceo Cascarudo y, para pasarla bien, dejó a Bob Esponja al mando de todo, aunque, por su miedo ante la inmadurez de la Bob, no pudo estarse quieto y se agotó a sí mismo hasta la locura y un aparente desahucio.
  2. Una de las más icónicas: cuando va a pescar medusas. Sí: recuerdas bien: el maratón del dolor. Cuando el pobre calamardo cae por un barranco y tienen que vendarlo de cuerpo entero, sólo para luego quemarse con sopa hirviendo y encima sufrir por culpa de una medusa en partida doble: porque le atravesaron la pierna y por estar electrocutado. Vamos, que esto no es todo, pero hay que dejar algo para el disfrute propio.
  3. ¿Quién no ha querido aprender a manejar? Pues a Calamardo no le han quedado ganas después de ese capítulo donde queda atrapado en la escuela de manejo, pero logra escapar de Bob y luego entonces tiene un accidente por una señalización, cosa que desencadena una golpiza, una multa y encima más tiempo de clases.
  4. Ese episodio donde Bob Esponja y Patricio se meten a la casa de Calamardo sin permiso alguno para molestarlo sin descanso, lo que hace que este huya y se tope con un camión que le derrama kilos y kilos de cemento que le dejan casi inmóvil, y, así, al intentar escapar, cae por el vacío hacia un campo de medias que, claro, le electrocutan… En fin, como estar atrapado. Sólo diremos que logra volver a Fondo de Bikini… ¡luego de días!
  5. Y cómo olvidar ese capítulo donde (¡otra vez!) se escapa de los dos amigos porque le están molestando y como venganza anda por todo Fondo de Bikini tocando la flauta y, claro, molestando a todo el mundo. Y se repite luego la historia (le persigue la desgracia): cae por un barranco por culpa de un camión de gasolina, se entierra la flauta en la garganta… y se entera, ya en el doctor, que no podrá recuperar su voz, y sí, por el contrario, comunicarse con los sonidos de la flauta. Un escándalo.

DG