Orgulloso de su desempeño en la Policía, Omar García Harfuch se ha mostrado reacio a cambiar de estrategia y mostrarse como alguien que va más allá de tener actividades meramente policiales; aún así, en su cuarto de “guerra” algunos de sus colaboradores se empeñan en destacar otras cualidades o méritos como servidor público e incluso un diplomado en políticas públicas por la Universidad de Harvard… y parece que ya lo convencieron.

En lugar de responder con la virulencia con la que ha sido atacado por sus compañeros de movimiento que no simpatizan con él, algunos de ellos alentados desde una oficina de Palacio Nacional, o al menos eso creen en su equipo, la estrategia del aspirante a la candidatura al Gobierno de la Ciudad de México se replanteará para mostrar su rostro como un servidor público eficiente.

La forma en que un grupo de tuiteros y opinadores de la 4T se refieren a él como “el policía”, y que en ocasiones adquiere un tono clasista, omite, recuerdan algunos de sus colaboradores más cercanos, que cuando Claudia Sheinbaum dejó la jefatura de Gobierno asumió que le dejó la responsabilidad de encabezar de manera estratégica el gabinete de seguridad y justicia, que ella dirigía; incluso, con esa coordinación, él mismo tenía la capacidad legal de convocar a reuniones del Gabinete de Gobierno, pues bajo ese cargo estaban las áreas de los programas prioritarios para la ciudad, los sociales e incluso la secretaría de Gobierno.

Claro, no se dejarán de lado sus resultados positivos obtenidos en su reciente paso por la Secretaría de Seguridad capitalina, donde logró una reducción de hasta 58 por ciento en los delitos de alto impacto.

Aunque se busca con esta línea poner énfasis en que el exsecretario de Seguridad Ciudadana tiene una visión más profunda de los problemas que se enfrentan los ciudadanos en las diversas alcaldías de la capital ―tanto en las que gobierna Morena como en las que encabezan otros partidos―, así como la mayor experiencia en la instrumentación de estrategias de solución.

Con lo anterior, el cuarto de “guerra” de Harfuch pretende dejar claro que su perfil es el único que está en el ánimo de las clases medias y, por lo tanto, quien podría recuperar los votos que en la elección intermedia de 2021 se fueron del lado de la oposición, por resultados transversales que se reconocen también en estratos sociales que no suelen estar en el target de Morena.

Por supuesto, defenderá la máxima del cuartotransformismo: “primero los pobres”; por lo que el proyecto del exsecretario contempla hablar de la construcción de un estado de bienestar y seguridad que priorice a los ciudadanos más vulnerables, para impulsar el desarrollo de la comunidad en su conjunto.

#LoboSapiensSapiens

Con todo el apoyo

El favorito de Claudia Sheinbaum encabeza las encuestas internas del partido, como un candidato que han arropado los votantes de la oposición; pero deberá superar todavía a candidatos con fuertes estructuras locales, además de una repartición de candidaturas por cuotas en materia de género y por eso las estructuras de la CDMX comenzaron a apoyarlo, así como sus operadores. Tal parece que la virtual candidata presidencial no abandonará a su exsecretario.

 

     @chimalhuacano