Ante los estímulos fiscales que otorga el Gobierno Federal para atraer inversiones en el sur-sureste del país, especialistas en comercio entre México y Estados Unidos, criticaron la falta de infraestructura social que acompañe esa estrategia.
Keneth Smith, ex jefe negociador del TMEC, señaló que los estímulos delineados por el secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O no son nuevos y tampoco son innovadores.
“Muchos de los incentivos que se están presentando hoy en día que anuncia el Secretario de Hacienda, pues son incentivos que cuyos efectos vamos a ver a largo plazo, si es que de verdad se implementan como dicen que se van a implementar”.
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Incluso criticó que estos estímulos no se hayan dado desde el inicio del sexenio, “ha habido un enfoque, llamémoslo, obsesivo sobre el tema de la austeridad presupuestal en todos los aspectos del gobierno” por lo que advirtió que, lo primero que se tiene que hacer para desarrollar el potencial del corredor transÍstmico; es construir, estructurar, invertir y desarrollar.
Enfatizó que las grandes obras de la administración aún no han “cuajado”, entre ellas, la Refinería de Dos Bocas o el Tren Maya y señaló que para darles viabilidad es necesario que se acompañen con políticas públicas locales, como mayor infraestructura no sólo de movilidad como carreteras y puertos, sino también una estructura social que tenga atractivos para la llegada de mano de obra esas zonas.
En tanto, Jaime Zabludovsky, Presidente Ejecutivo del Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo, advirtió que aun existen elementos que no permiten atraer la inversión, como la falta de energía de carácter sustentable.
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“En algunos lugares ya, el tema de falta de electricidad es un tema que está frenando y obstaculizando la inversión extranjera y nacional. Entonces claramente eso es un tema que nos va a alcanzar e idealmente esperemos que se corrijan y se generen las condiciones para que se genere la suficiente electricidad en las condiciones competitivas para estar a la altura de las oportunidades que podemos estar enfrentando”, advirtió.
El especialista recordó que aún enfrentamos un diferendo en el marco legal que regula la generación de energía, elemento que se suma a la incertidumbre de las inversiones para generar condiciones de competencia y eficiencia.
A ello agregaron, se suma las deficiencias en el Estado de derecho, como la alta inseguridad, que reduce el atractivo de inversiones en el país y los empresarios tienen que integrar el costo de la seguridad privada en su presupuesto, con el fin de solventar la inseguridad.