A pesar de que la cita era a las 11 de la mañana, desde antes de las nueve de este domingo, niños, jóvenes y adultos ataviados con prendas rosas empezaron a llegar por las calles aledañas a la plancha del Zócalo capitalino, para asistir a la segunda movilización civil en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE).

Ante el gran número de asistentes de la primera edición de la marcha el año pasado, esta vez los diversas organizaciones civiles se previnieron y desde avenida Madero, 20 de noviembre y 5 de mayo habilitaron pantallas gigantes, para que aquellos que no lograran llegar hasta Plaza de la Constitución también disfrutaran del evento.

En tanto, los actores políticos no se hicieron esperar y poco a poco empezaron a llegar figuras como el dirigente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano; el presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel; la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, y el presidente del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés.

Tampoco faltaron los ambulantes que anunciaban llaveros, sombreros y banderas rosas con el mensaje “El INE no se toca”, las cuales ondeaban en las caras de los asistentes, algunos de los cuales se animaban a hacer la compra.

No obstante, el optimismo de la gente, al llegar al Zócalo, se encontró con una manta gigante desplegada frente a Palacio Nacional, con la fotografía de Genaro García Luna, declarado culpable por narcotráfico en Estados Unidos, acompañado de la leyenda “García Luna no se toca”.

Esto ocasionó la inmediata intervención de los manifestantes, quienes entre gritos de “sí se pudo”, cortaron, bajaron y lanzaron la manta tras las vallas que resguardaban Palacio Nacional.

Exacerbados ante tal acción, los ya cientos de miles de asistentes no dudaron en entonar consignas como “Yo a eso vine, a defender al INE”, “Mi voto y el INE no se toca”, a ondear sus banderas y agitar sus carteles.

Tras el mensaje de la periodista Beatriz Pagés y el ministro en retiro, José Ramón Cossío, donde expusieron sus argumentos contra el Plan B, las más de 500 mil voces presentes entonaron el Himno Nacional, en un símbolo de unidad en pro de la institución que garantiza la democracia.

Al término, el exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro, reconoció que está bien mejorar las legislaciones existentes, pero debe ser en el momento oportuno.

Tras un par de horas, poco a poco la multitud comenzó a disolverse por las vialidades abiertas, hasta que en el Zócalo solo quedaron los mensajes en defensa al Instituto y alguno que otro defensor del Plan B, intentando pelear con los rezagados.

FRASES:
“Venimos a decirle (a AMLO) que al INE y al voto no se le toca”. José Narto, exrector de la UNAM.
“Con esta propuesta estamos regresándonos 40 años”. Guadalupe, asistente a la movilización.
“No quiero regresar a los tiempos cuando era joven, donde el Gobierno asumía la responsabilidad de las elecciones”. Jesús, asistente a la marcha.

 

LEG