Foto: AFP | García Luna En sus primeros años en el Cisen se encargó de monitorear la actividad de los grupos guerrilleros activos en México.
Foto: AFP | En sus primeros años en el Cisen se encargó de monitorear la actividad de los grupos guerrilleros activos en México.  

Genaro García Luna, ingeniero mecánico de formación, dirigió la ahora renombrada Agencia Federal de Investigación de México, encargada de combatir la corrupción y el crimen organizado, entre 2001 y 2005.

El exfuncionario mexicano fue reclutado en 1989 como investigador del desaparecido Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), el área de Inteligencia de la Secretaría de Gobernación mexicana

En sus primeros años en el Cisen se encargó de monitorear la actividad de los grupos guerrilleros activos en México, especializándose posteriormente en el combate a bandas de secuestradores.

Del Cisen pasó a la Policía Federal Preventiva y de allí a la Agencia Federal de Investigación, dos corporaciones que desaparecieron cuando García Luna se encargó de la Secretaría de Seguridad Pública a partir de 2006.

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Luego, con el expresidente Felipe Calderón, quien lanzó una ofensiva contra las bandas de narcotraficantes de México durante sus seis años de presidencia, García Luna fue Secretario de Seguridad Pública, con el control de la policía federal.

Fue desde ese puesto que García Luna impulsó el combate al narcotráfico, conocido como “guerra contra el narco”, que incluía la participación del ejército. 

Al término de la administración de Calderón en 2012, García Luna se mudó al estado de Florida en EU. Allí residió hasta su detención en Texas en diciembre de 2019.

Actualmente, el equipo de defensa de García Luna ha indicado que argumentarán que su cliente en realidad estaba ayudando a la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA).

El abogado César de Castro ha pedido al juez que le permita presentar pruebas de que García Luna se reunió con funcionarios del gobierno de Estados Unidos y recibió “reconocimientos y premios… por sus esfuerzos en la lucha contra los cárteles mexicanos de la droga”.

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La periodista de investigación cubano-mexicana Peniley Ramírez, quien escribió un libro e hizo un podcast sobre García Luna, dice que “no se ha dicho lo suficiente sobre cuánto sabía la DEA” sobre sus supuestas actividades.

“¿Por qué el gobierno de Estados Unidos siguió confiando en él y durante tantos años, a pesar de que había muchas pistas de que algo andaba mal?”. Ella le dijo a la AFP.

Ramírez cree que el hecho de que García Luna se mudara a Miami en 2012 después de que Calderón dejara el cargo demuestra que “tenía razones para creer que nunca le iba a pasar nada”.

García Luna fue detenido en Texas en diciembre de 2019. También está acusado de mentir cuando solicitó la ciudadanía estadounidense en 2018.

Además, el nombre de García Luna está también ligado al de la francesa Florence Cassez y su expareja Ismael Vallarta, detenidos en un operativo preparado para los medios de comunicación, por su supuesta participación en secuestros. El caso llevó al borde de la ruptura las relaciones diplomáticas con Francia. Después de 6 años en la cárcel, Cassez fue liberada, pero Vallarta sigue detenido desde hace casi 20 años, sin que se haya celebrado un juicio.

El actual gobierno mexicano, que ha solicitado la extradición de García Luna desde Estados Unidos, lo ha acusado de robar más de 200 millones de dólares de fondos públicos.