Tras el cateo a 10 inmuebles ubicados en cuatro alcaldías capitalinas, elementos de la Fiscalía General de Justicia (FGJ), del Centro Nacional de Inteligencia y de la Secretaría de la Defensa Nacional decomisaron más de 300 kilogramos de droga y detuvieron a seis personas.
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En conferencia de prensa, el vocero de la FGJ, Ulises Lara, calificó el operativo como “uno de los más importantes aseguramientos de droga realizados durante la presente administración de la Ciudad de México”.
Precisó que los 10 cateos se realizaron la madrugada de ayer en predios ubicados en las alcaldías Tlalpan, Coyoacán, Xochimilco y Gustavo A. Madero.
“Se aseguraron cerca de 350 kilogramos de droga, armas largas y cortas, dólares americanos, 31 vehículos y se detuvo a seis personas, posibles integrantes de una célula delictiva ligada a un grupo criminal”, abundó el funcionario.
De la droga asegurada, se presume que se encontraba distribuida en un aproximado de 520 paquetes, de los cuales 330 estaban forrados con cinta canela y contenían una sustancia blanca con características de la cocaína, mientras que 190 bolsas resguardaban un vegetal similar a la mariguana.
En el cateo realizado en la colonia Adolfo Ruiz Cortines, en Coyoacán, se aseguró la mayor cantidad de estupefacientes, mientras que en Tlalpan y Xochimilco se recuperaron 28 de los 31 automotores.
Los detenidos, detalló Lara, fueron Concepción N. y Kumen N., Alejandro N, y Juan Manuel N, alias Juanito, en Coyoacán; Marco N., alias Pandilla, en Tlalpan; y Carlos Alejandro N., alias Shagui, en la GAM.
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Según el informe, a Alejandro N. y Juan Manuel N. se les identifica como presuntos líderes de la célula criminal, mientras que a Kumen N. se le señala como posible operador financiero.
Las labores de inteligencia determinaron que la célula delictiva está ligada a un grupo criminal, aunque no se precisó a cuál.
Se añadió que tal célula mantenía operaciones en Tlalpan, Coyoacán, Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta, así como en Morelos, Guerrero, Nuevo León y Coahuila.
Según las indagatorias, el modus operandi de la célula delictiva consistía en traer droga desde Sudamérica e ingresarla a territorio nacional a través de Chiapas, desde donde se transportaba en vehículos con compartimientos ocultos a la capital, para después llevarla a Nuevo León y Coahuila, su destino final.
FRASE:
“No se tolerarán conductas al margen de la ley, como es el caso de la venta y distribución de sustancias psicotrópicas que atentan contra la salud”
Ulises Lara
Vocero de la FGJ
LEG