Foto: Cuartoscuro Un grupo armado ingresó al Centro de Readaptación Social de Tula -con una camioneta que usó como tanqueta- y se llevó a José Artemio Maldonado Mejía y ocho reos más, al tiempo que hizo detonar dos coches bomba para distraer a las autoridades y poder huir.  

La sustracción de nueve reos del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Tula, Hidalgo, por parte de un comando armado es un desafío al Estado mexicano por parte del crimen organizado, el cual ha escalado en capacidades técnicas y operativas, así como en armamento, afirmó Javier Oliva Posada, experto en seguridad nacional.

“Es un desafío notable en donde lo que queda en evidencia es una falla estructural que venimos acusando desde hace varios años y que es, sin duda alguna, la debilidad de las corporaciones policiacas a nivel local, entiéndase municipal y estatal”, subrayó.

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En entrevista con 24 HORAS, el profesor e investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alertó que la organización y detonación de coches bomba para sustraer a los criminales habla de un nivel más sofisticado que la utilización de fusiles de asalto.

“En términos cualitativos representa un caso que hay que atender y que hay que impedir que se vuelva una forma de operar más extendida”, detalló.

IBAN POR ARTEMIO MALDONADO

La madrugada de este miércoles, un grupo armado desató un tiroteo, irrumpió al penal de Tula y amagó a los custodios para luego sustraer a nueve reos, entre ellos José Artemio Maldonado Mejía, alias El Michoacano, El R y/o Rabias, identificado como presunto líder del grupo armado Pueblos Unidos.

Para ello, el comando derribó -con una camioneta distribuidora de gas modificada que usó como tanqueta- parte de la barda del penal, al tiempo que hizo detonar dos coches bomba, uno cerca del hospital regional Tula-Tepeji y otro en la colonia El Llano, cerca del Cereso, para distraer a las autoridades.

Cámaras de vigilancia de una caseta de cuota de carretera México-Querétaro captaron el momento de la huida de los reos y en las imágenes se observa al líder del grupo Pueblos Unidos a bordo de una camioneta pickup color gris, a quien -en una grabación posterior- incluso se le ve cuando paga su peaje.

En conferencia, la Procuraduría General de Justicia y la Secretaría de Seguridad Pública estatales confirmaron la fuga de nueve reos, mientras que dos policías resultaron heridos al enfrentarse con los delincuentes.

Posteriormente, las autoridades aseguraron una camioneta con explosivos, en la refinería Miguel Hidalgo Pemex, ubicada en la carretera Jorobas Tula, que estaría relacionada con los hechos.

CITA:

Se trata de un desafío al Estado mexicano en su conjunto, indudablemente, porque estos delincuentes, al ser sustraídos, evidentemente van a dedicarse a lo que estaban haciendo”

Javier Oliva Posada
Experto en seguridad nacional

Confirma PGJH la evasión de El Michoacano

Por: Quadratín

La Procuraduría General de Justicia de Hidalgo confirmó los nombres de ocho de los nueve reos que fueron sustraídos del penal de Tula.

El procurador Alejandro Habib, precisó que los internos estaban en el Cereso por delitos del fuero común como homicidios y secuestro, los cuales ocurrieron en el distrito judicial de Tula, razón por la que estaban recluidos en ese penal.

El ataque habría sido para liberar a José Artemio Maldonado Mejía, El Michoacano, presunto líder huachicol en Hidalgo y jefe del grupo delictivo denominado Pueblos Unidos, principal operador del robo de combustible.

Su detención fue el 26 de noviembre pasado, en Texcoco, bajo los cargos de homicidio y secuestro, más no por robo de combustible.

No obstante, es conocido el dominio que tiene su grupo delictivo que opera desde Tepetitlán, pero que mantiene el poder en la región del valle del Mezquital.

Los otros reos fugados son: Mariano Maldonado, Jovani Sánchez, Román Farfán, Juan Rangel, Abel Millán, Fernando Cerón, Yair Hernández y Jaime Eusebio.
LEG