La Administración Nacional Oceánicoa y Atmosférica (NOAA) ha ofrecido una recompensa de 20.000 dólares para encontrar a los responsables de haber disparado a dos delfines en Florida.

La semana pasada en la costa de Naples fue descubierto un delfín con una herida de bala en la cara, además su cuerpo estaba lastimado como si lo hubieran atacado con objetos afilados.

Expertos del “Emerald Coast Wildlife Refuge” en Pensacola encontraron otro delfín con una herida de bala en el lado izquierdo de su cara.

De acuerdo con medios locales, desde 2002 alrededor de 29 delfines han muerto por estos ataques en la costa del sureste de Estados Unidos. Tan solo en lo que va de 2020 se han registrado cuatro casos similares.

Algunos biólogos han señalado que los humanos alimentan a los delfines desde los barcos provocando que los mamíferos los asocien con alimentos. Las embarcaciones pueden golpear a los delfines y ocasionar que se enreden o ingieran objetos.

La Ley de Protección de Mamíferos Marino prohíbe acosar, cazar, matar o alimentar a delfines salvajes.

 

 

ica