China retirará las restricciones de negocio a los bancos, corredurías y gestores de fondos extranjeros, indicó el miércoles una reunión de gabinete presidida por el primer ministro, Li Keqiang, según la televisión estatal.

 

Pekín ha acelerado sus esfuerzos para abrir el sector financiero en medio de una prolongada guerra comercial con Estados Unidos. Una de las principales demandas de Washington es que el gigante asiático mejore el acceso a su sector financiero.

 

La semana pasada, China anunció un cronograma firme para abrir sus sectores de futuros, correduría y fondos mutuos a los inversores foráneos el año próximo, en su último paso para desregular la industria financiera del país, valorada en varios billones de dólares.

 

El gabinete no dio detalles sobre los efectos que tendrá el fin de las restricciones.

 

China también respaldará los esfuerzos de los gobiernos locales para atraer más inversión extranjera y ofrecer más margen para el préstamo en el exterior, señaló el gabinete.

 

Asimismo, precisó que Pekín no permitirá transferencias forzadas de tecnología de empresas foráneas.

 

La estabilización de la inversión extranjera forma parte de las políticas puestas en marcha por Pekín para respaldar a una economía en desaceleración por la prolongada guerra comercial con Estados Unidos.