Foto: Archivo 24 Horas La información estadística ya disponible sugiere que la actividad económica en México continúa con un bajo crecimiento, por factores como el desabasto de gasolinas en enero, la baja en la nota crediticia de Pemex, los bloqueos en las vías férreas de Michoacán y los paros laborales en Tamaulipas  

Banxico confirma desaceleración en el primer trimestre

A pesar de que los miembros de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidieron por unanimidad mantener la tasa de referencia interbancaria en 8.25%, advirtieron sobre síntomas de desaceleración económica mundial y riesgos de un bajo crecimiento en el país.

Al dar a conocer su más reciente decisión de política monetaria, el banco central puntualizó que “la información estadística ya disponible, sugiere que a principios de 2019 la actividad económica en México continuó mostrando un bajo crecimiento”, esto como consecuencia al entorno global, que presenta una desaceleración económica y una debilidad de la demanda interna.

Agregó que el hecho de que la economía vaya en picada es consecuencia de “algunos factores de carácter transitorio” que pudieron haber afectado al crecimiento en el primer trimestre del año como el desabasto de gasolinas en la primera quincena de enero, la baja en la nota crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex), los bloqueos en las vías férreas de Michoacán y los paros laborales en Matamoros, Tamaulipas.

Sin embargo, destacó que a pesar del entorno volátil en los mercados financieros internacionales, los activos financieros en México se han mantenido, aunque insistió en que hay factores de riesgo asociados a la economía mexicana.

Es por ello que recomendó, una vez más, al nuevo Gobierno fomentar prácticas que impulsen la confianza externa para mejorar la inversión, la productividad y que ello se refleje en un buen estado de las finanzas públicas.

“En este contexto, es particularmente relevante que se cumplan las metas fiscales del Paquete Económico para 2019. Asimismo, es indispensable fortalecer el estado de derecho y abatir la corrupción”, explicó.

Por otro lado, recordó que entre enero y la primera quincena de marzo, la inflación general disminuyó de 4.37% a 3.95%, debido principalmente a menores incrementos en los precios de los energéticos y de los productos agropecuarios.

“No obstante, algunos de los choques favorables que han conducido a la reducción del componente no subyacente recientemente han comenzado revertirse. En particular, los precios de los energéticos aumentaron en la segunda quincena de febrero”, alertó.

Los miembros de la Junta de Gobierno del banco central confiaron en que a pesar del entorno complicado, la inflación podría bajar.

 

Riesgos para el PIB y la inflación

Volatilidad por entorno externo complejo.
Debilidad de la demanda interna.
Aumento en los precios de los energéticos.
Políticas internas que generan
desconfianza a las inversiones.
Calificación crediticia
de Pemex y su situación financiera.

 

Juan Ángel Espinosa

LEG