Grajeros de Madhya Pradesh, al centro de la India, se han quejado recientemente de los loros que habitan la zona, ya que éstos se han estado comiendo la plantaciones de amapola y se han vuelto adictos a ella.

 

Se señala que dichos loros “se drogan” consumiendo la planta de la cual se extrae el opio, lo que para los granjeros ha resultado una gran molestia y una amenaza, ya que las aves acuden entre 30 y 40 veces al día para alimentarse.

 

Para combatir el problema, agricultores ha decidido vigilar las plantaciones durante todo el día y también se ha implementado el uso de pirotecnia para ahuyentar a los loros, no obstante, los animales ya no se asustan y el problema se ha agravado.

 

Cabe destacar que el cultivo de opio es legal en la India, ya que es utilizado para la creación de medicamentos como la morfina.

 

Por ello, la visita de loros ha representado una gran pérdida para los agricultores, quienes afirman, el problema ha ido en aumento desde el año 2015.

gac