Foto: Reuters/ Archivo El gobierno iraquí reportó que unos 2 mil combatientes iraquíes del EI, que se encuentran en la frontera en el este de Siria, tratan de regresar a Irak  

BAGDAD.- Al menos cinco civiles murieron y otros 16 resultaron heridos por la explosión de un coche bomba frente a un restaurante en la ciudad de Tikrit, en el norte de Irak, sin que hasta ahora ningún grupo extremista reivindique el atentado, informaron fuentes policiales.

 

La explosión, de gran potencia, incendió casi una docena de vehículos y obligó al cierre inmediato de la mayoría de las calles de ciudad, dando acceso sólo a las unidades de emergencia, según la policía iraquí.

 

Hasta el momento, nadie ha asumido la responsabilidad del ataque que dejó cinco muertos, entre ellos tres mujeres, sin embargo, tiene el sello del grupo yihadista Estado Islámico (EI).

 

Este tipo de atentados han sido raros en Tikrit, a unos 100 kilómetros al norte de Bagdad, desde que el EI fue derrotado en Irak en 2017.

 

El atentado de este domingo se produjo horas después de una redada llevada a cabo por las fuerzas iraquíes contra EI en Mosul, capital de la provincia de Nínive, se saldó con la muerte de seis yihadistas y la detención de 46.

 

Asimismo, después de que las fuerzas de seguridad iraquíes mataron a 10 yihadistas del EI y destruyeron sus escondites y túneles subterráneos cerca de la aldea de Kanous, en la ciudad de Shirqat, en la provincia de Saladino, según el sitio Iraqi News.

 

Según la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas para Irak (UNAMI), un total de 69 civiles fallecieron en octubre pasado y otros 105 resultaron heridos como consecuencia de los actos de terrorismo y violencia en todo Irak, si bien esa cifra mensual fue la más baja desde noviembre de 2012.

 

La semana anterior, el gobierno iraquí reportó que unos 2 mil combatientes iraquíes del EI, que se encuentran en la frontera en el este de Siria, tratan de regresar a Irak, pero que las fuerzas de seguridad están preparadas para evitarlo.

 

A finales de 2017, el primer ministro iraquí, Haider al-Abadi, declaró la victoria final sobre el EI, sin embargo, el grupo extremista todavía lleva a cabo atentados en partes de Irak, por lo que llamó a sus tropas a permanecer vigilantes ante la amenaza de células durmientes.

dpc