Foto: Especial Agregó "todo ser humano nace de una mujer, por lo que a ellas debemos respetarlas y cuidarlas"  

Mario Núñez, un chofer de 71 años, debe conducir una unidad de transporte público 12 horas al día junto a su esposa Fresia Farías, de 65, debido a que ella sufre de alzheimer.

“No tengo con quién dejarla”, asegura el hombre originario de Coquimbo (Chile), agregando que la avanzada enfermedad de la mujer complica todo, pero que no es impedimento para seguir a su lado.

“Aunque ella no sepa de mí, y haya ocasiones en las que no me recuerde, siempre será mi compañera”, dijo al señalar que lo que recibe como pensión no le alcanza, por lo que tuvo que salir a trabajar y así poder pagar los medicamentos.

La historia se viralizó, luego de que una mujer publicara fotografías de la mujer dormida, mientras su esposo conduce el camión.

“Haga frío o calor, o como sea que esté el clima, tengo que levantarla. A mí me da pena hacerlo, porque la veo durmiendo y no quisiera. Le pongo su ropa, le lavo los dientes, tengo que llevarla al baño y limpiarla cuando hace sus necesidades porque ella no es autónoma para hacerse sus cosas”, detalló.

El conductor de microbús aseguró que a su esposa le gusta que “le tome su mano y que la saque a pasear”, por lo que indicó, que lo hará en la medida que pueda.


“Yo la he cuidado solo, pero se me ha hecho muy pesada la situación, esto me tiene realmente estresado y no doy más (…) hay veces que me dan ganas de autoeliminarnos”.

Agregó “todo ser humano nace de una mujer, por lo que a ellas debemos respetarlas y cuidarlas”.

Tras darse a conocer la historia, la Fundación Las Rosas informó que acogerá a Fresia.

 

 

JMSJ