Foto: Reuters Migrantes encapuchados que querían cruzar la frontera hacia México chocaron con la Policía guatemalteca; hubo al menos 10 heridos y, presuntamente, un muerto. Tras superar a los uniformados de Guatemala, corrieron por el puente, pero se toparon con una valla de acero, sujetada a cadenas. No pudieron pasar. La Secretaría de Gobernación condenó los hechos y aclaró que la Policía Federal no está armada  

Luego del enfrentamiento que ocurrió ayer entre migrantes hondureños y elementos de la Policía Federal en la frontera entre México y Guatemala, el secretario de Gobernación Alfonso Navarrete Prida, señaló que algunos de los agresores portaban armas de fuego y otros bombas molotov.

“Se ha procedido a compartir información con los gobiernos de Guatemala, El Salvador y Honduras, de aquellas personas que han sido identificadas como portadores de estas armas, para que, si es el caso, se proceda a su detención y puesta a disposición de la autoridad competente”, expresó el funcionario en un mensaje a medios.

Afirmó que el gobierno federal rechaza las manifestaciones de violencia y reiteró que la única vía para ingresar a México es mediante el cumplimiento de las leyes migratorias; añadió que los efectivos no portaban armas, ni siquiera con balas de plástico.

Respecto al deceso de un migrante que presuntamente falleció, fuentes consultadas manifestaron que pudo tratarse de una roca lanzada desde el mismo grupo de agresores, ya que la Policía Federal estaba detrás de la valla y se dio la instrucción de no devolver los cientos de rocas que les lanzaron.

Migrantes rompen valla entre Guatemala y México, se enfrentan con la policía

Miles de migrantes, en su mayoría hondureños, rompieron hoy la valla metálica que separa a Guatemala de México y después de un enfrentamiento con la policía cruzaron corriendo y gritando a territorio mexicano.

Los antimotines guatemaltecos lanzaron bombas lacrimógenas a los migrantes que, en su desesperación por seguir su trayectoria hacia Estados Unidos, respondían con piedras y palos.

“Vamos para México”, gritaban los migrantes de esta nueva caravana desesperados y ahora se dirigen a la aduana mexicana, donde hay una fuerte presencia policial.

Durante el enfrentamiento, se vivieron momentos de mucha tensión, los niños lloraban mientras las madres los agarraban de la mano y los arrastraban para continuar el paso y salir de la línea de fuego, donde varios resultaron heridos.

“No entiendo porque hacen esto señor. ¿Acaso los niños no tienen derecho?”, gritaba un señor entre lágrimas lamentándose de que algún pequeño pudo haber muerto.

Una primera caravana de migrantes, con unas 7 mil personas, partió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras) con dirección a Estados Unidos y gran parte de ella marcha actualmente por México, tras pasar por Guatemala.

Mientras, esta segunda caravana, de unas mil 500 personas, también tiene a Estados Unidos como destino final, y se prevé la llegada en los próximos días de otra de migrantes salvadoreños que este domingo salieron de su país.

El Gobierno de Honduras informó que cuatro mil inmigrantes hondureños de caravana han “retornado” a su país “voluntariamente”.

El presidente de EU, Donald Trump, ha adoptado una postura muy dura, amenazando con enviar el Ejército a la frontera, y ha asegurado que recortará “sustancialmente” la ayuda económica que concede a Guatemala, Honduras y El Salvador como represalia por el avance de los migrantes, al tiempo que ha arremetido contra México por no detenerla.
Con información de EFE

LEG