FOTO: CUARTOSCURO Medida espejo. Sectores aplauden la medida del Gobierno mexicano; se busca cobrar el daño por 3 mil mdd que éstos significarían para el país  

Ante la aplicación de aranceles por parte del Gobierno mexicano a más de 70 productos de exportación estadounidense, como represalia por la implementación de impuestos al acero y aluminio, diversos sectores comerciales calificaron esta maniobra como acertada, misma que fue consensuada y no se buscó afectar a los consumidores.

 

Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, afirmó que esta medida arancelaria busca minimizar el impacto a la inflación mexicana. También, destacó con esta medida, “no se busca dañar competitividades de cadenas productivas” lo que se estima es “reducir el impacto inflacionario, y que éste no forme parte de la canasta básica”, afirmó.

 

Añadió que con esta medida, México también se cobrara el daño por los aranceles aplicados por EU con un estimado de tres mil millones de dólares.

 

Por su parte, Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), aseguró que con esta aplicación de aranceles se buscó cuidar al consumidor y a los productores del sector, ya que “con producción nacional y con acuerdos de otros países se puedan substituir las importaciones o equilibrar para que se impacte lo menos posible o definitivamente evitar el aumento en los precios”. Mario Andrade, vicepresidente de Comercio Exterior del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), afirmó que esta medida fue consensuada entre la iniciativa privada y la SE, con el fin de que aquellos productos que no se vean afectados y puedan cubrir la demanda de los consumidores no afecten ambos sectores.

 

En caso concreto, se habló con los productores de manzana, y al saber que se cuentan con cantidad necesaria para cubrir la demanda, entró en la lista de los aranceles. Por su parte, la uva fue quitada, para no dañar el mercado, ya que no se podría cubrir la demanda que se tiene.

 

Alejandro Ramírez, director general de la Confederación de Porcicultores de México aseguró que los aranceles impuestos a la carne de cerdo (pierna, paletas y sus trozos sin deshuesar) de 20% por parte de México hacia los exportadores estadounidenses, no afectan al consumidor mexicano ni pone en riesgo el precio del producto.

 

En entrevista, el directivo aseveró que no habrá impacto en el consumidor mexicano, porque a la vez que la SE aplicó el arancel también publicó un cupo de importación, por hasta 350 mil toneladas de productos provenientes de 10 países (Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Dinamarca, Chile, España, Francia, Alemania, Italia y Bélgica) y con ello compensar la demanda para lo que resta del año.

 

Mencionó que en 2017, el país importó 650 mil toneladas de pierna y espaldilla de puerco, de los cuales, 85% provino de Estados Unidos. Explicó que el arancel impuesto es el máximo y se aplicará a cuatro fracciones arancelarias que son las dos de pierna con hueso y el resto que son las “demás”, es decir todos aquel producto que viene deshuesado y algunos cortes específicos. Con esta medida, dijo, hay una oportunidad de crecimiento del productor mexicano.

 

 

Juan Ángel Espinosa

 

 

JNO