Sabíamos que mayo sería un mes relevante para evaluar el potencial de un acuerdo preliminar del TLCAN. Desde el Presidente y hasta el propio líder del Congreso buscaron presionar con fechas como el 17 y 31 de mayo para alcanzarlo. Sin embargo, la posición radical de Estados Unidos llevó a México y Canadá a no moverse generando un conflicto comercial con el vecino del Norte.
Fuimos reiterativos que al considerar poco probable este acuerdo, el riesgo de una posición más radical del presidente Donald Trump estaría en el radar.
Trump comienza a mostrar signos de una rudeza por los tiempos políticos que empiezan a darse en la Unión Americana. Imponer aranceles al acero y aluminio a la UE, México y Canadá es parte de una posición electoral.
Así lo acabará haciendo también con China en su momento. Desde este sábado pasado tienen una nueva reunión comercial. China ya condicionó que cualquier acuerdo alcanzado no entrará en vigor si Estados Unidos impone aranceles, pero no creo que sea suficiente.
Lo triste de esto es que acabará por generar un efecto negativo mundial que al final afecte el ritmo de crecimiento económico de su propio país. Lo podríamos ver en 2019, aunque los mercados se adelanten y quizá en el segundo semestre de 2018 empiece alguna corrección más en forma.
Veremos ahora si en realidad el Gobierno americano busca hacer acuerdos bilaterales y dar por terminado el TLCAN o simplemente es un capricho como parte de una presión política-económica.
El peso mexicano será la válvula de escape. Viene probando como resistencia en el mercado interbancario niveles de 20.05. Si lo supera buscará la zona de 20.30 inicialmente o hasta los 20.80. Junio seguirá siendo un mes de presión, también por el proceso electoral que entra a sus últimas cuatro semanas. Mientras respete 20.05 como resistencia, vemos una zona baja en 19.70 y una fuerte en 19.40, donde se esperarían nuevos rebotes en su caso.
La Zona Euro respira
Tanto Italia como España lograron propios acuerdos que reducen la aversión al riesgo en los mercados. Estas naciones alcanzan una deuda / PIB de 131% y 97%, respectivamente. Dentro del PIB de la Zona Euro, ambos países representan 28% de la economía; de ahí el efecto sobre el euro y los mercados. Si lo vemos con respecto a la economía mundial, el PIB de Italia y España representan 3.2% del crecimiento mundial, cuando Estados Unidos sólo representa 15% y México, cerca de 1%.
Por ahora, se disipa el riesgo de estas naciones, aunque la posición más de izquierda de la coalición en Italia la haría más sensible a los mercados. De España, a esperar un par de meses para ver la capacidad política de Pedro Sánchez.
Empleo en Estados Unidos
Un buen dato es la creación de empleos de 223 mil plazas nuevas con una revisión a la baja de cinco mil plazas en abril para alcanzar 159 mil puestos. Con ello, la creación promedio de empleos en los últimos 12 meses alcanza las 183 mil plazas, muy acorde al ritmo de crecimiento de 2.0% o un poco más en términos anuales. El sector servicios representa cerca de 77% al registrar una creación promedio durante los últimos 12 meses de 140 mil plazas.
Así la Fed seguirá en su camino de alza gradual de 25 puntos base en la siguiente semana cuando se reúna. Empleo e inflación, en zona propicia de normalización.