Luego de cancelar el pasado sábado su concierto en Acapaulco, Luis Miguel se reivindicó con sus fans durante el show que repuso este martes.
Con un escenario totalmente mejorado, el cantante se entregó a su publico con sus mejores canciones y en reiteradas ocasiones se acercó al público, en una de ellas se agachó a besar a un bebé y aventó rosas blancas a sus admiradoras que no dejaron de corear sus canciones y mandarle besos.
El artista salió al escenario luciendo un traje negro para deleitar a casi 7 mil personas -menos público que la fecha anterior en que reunió alrededor de 10,000-, interpretando una serie de popurrís con canciones como “Fría como el viento”, “Tengo todo excepto a ti” y “Entrégate”, por mencionar solo algunos de sus éxitos de los años noventa.
aarl