Un oficial de policía de Alburquerque recibió este lunes un premio en consideración al acto de bondad por haber adoptado a una recién nacida adicta a los opiáceos, debido a que es hija de una mujer sin hogar con problemas de adicción.

 

El 23 de septiembre, el oficial Ryan Holets, atendió el reporte sobre un posible robo en una tienda.

 

Al salir del establecimiento notó a una pareja sentada en la hierba contra una pared. Al parecer, el hombre y la mujer se inyectaban heroína a plena luz del día.

 

Ryan encendió su cámara y se acercó a la pareja, momentos después notó que la mujer estaba embarazada e inyectaba una aguja en el brazo de su compañero.

 

Crystal Champ, de 35 años, dijo al oficial que tenía casi 8 meses de embarazo y era adicta. Agregó que esperaba desesperadamente que alguien adoptara a su bebé.

 

EL oficial Ryan dijo que no podía sacudirse la voz en su mente diciéndole que esta era su oportunidad de ayudar y realmente marcar la diferencia.

 

Ryan le mostró a Champ una foto de su esposa y cuatro hijos, incluido un bebé de 10 meses, y en ese momento se ofreció a adoptar a su bebé.

 

Este lunes, durante una pequeña ceremonia en el Ayuntamiento de Albuquerque, Holt dijo que la bebé, ahora llamada Hope, tenía heroína y cristal de metanfetamina en su sistema y tuvo que desintoxicarse durante aproximadamente dos semanas.

 

El alcalde de la ciudad, Tim Keller, entregó a Holets el premio “Servicio destacado a la comunidad”, llamándolo héroe y modelo a seguir.

 

Se espera que la adopción llegue a ser definitiva antes de fin de año.

OT