En México, entre 2011 y 2016, el número de solicitudes de refugio aumentó 1000%, esto debido a dos factores, el aumento de la violencia en Centroamérica y la promulgación de la Ley sobre Refugiados, Proteccion Complementaria y Asilo Político, aseguró Mark Manly, representante en nuestro país de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnurt).

 

“Hace cinco años los refugiados no eran tema (en México), pero con la promulgación de la Ley ya hay un reconocimiento. También está el tema de los factores de empuje, la situación de violencia y pobreza en los países de origen”, aseguró Manly en conferencia de prensa para presentar la Encuesta Nacional sobre Refugiados 2017.

 

El representante de Acnur dijo que poco más de 80% de los solicitantes de refugio provienen de Centroamérica, especialmente de Honduras y El Salvador, naciones que en los últimos años sufren altos niveles de violencia.

 

Sobre los resultados de la Encuesta, la cual Acnur realizó con apoyo de la Organización Internacional del Trabajo, una de las conclusiones es que los refugiados tienen problemas para encontrar empleos formales y acordes a sus conocimientos.

 

Helmut Schwarzer, especialista en desarrollo económico y protección social de la OIT, dijo que de los refugiados en edad económicamente activa sólo dos tercios tienen un trabajo, y de estos, 89% labora en el mercado informal.

 

La razón, explicó Schwarzer, es porque los refugiados carecen de documentos de identidad o comprobantes de estudios que les permitan acceder a trabajos formales y acordes a sus capacidades.

 

jram