El periodo de votación anticipada cerró hoy en Texas, entidad donde se estableció un nuevo récord de participación, especialmente entre los votantes de origen hispano.

 

Datos de la Secretaría de Estado de Texas, la dependencia a cargo de las elecciones en la entidad, mostraban que hasta el miércoles, dos días antes del cierre de la votación temprana, más de 3.6 millones de personas habían votado en los 20 condados más poblados del estado.

 

El número de votantes que ya sufragó en esos condados representa el 37 por ciento de todos los electores registrados en Texas, y sobrepasa el récord previo de 3.5 millones, establecido en votación temprana en la elección de 2008.

 

La participación de los votantes de origen hispano en los condados más poblados de la entidad también estableció un nuevo récord.

 

Los votantes con apellidos hispanos representaron el 18.8 por ciento de los sufragios emitidos hasta el miércoles en los condados seleccionados.

 

Dicha cifra representó un 20.1 por ciento de aumento sobre la participación de los hispanos en las elecciones de 2012, según los datos recabados por Derek Ryan, un consultor político y exdirector de investigación del Partido Republicano de Texas.

 

El repunte de los hispanos es significativo, aunque probablemente aún no es suficiente para alterar el curso de las elecciones en Texas, donde los votantes de origen anglosajón todavía constituyen una abrumadora mayoría del electorado y suelen votar por el Partido Republicano.

 

“No creo que (el aumento) afecte este ciclo, pero sí creo que esto demuestra que el electorado está cambiando (…) Estamos viendo que más hispanos se registran para votar y, como dicen los números, estamos viendo aparecer más hispanos”, destacó Ryan.